Indignación en sectores laicos de la capital andaluza y satisfacción en el mundo eclesiástico. Mientras el Ayuntamiento de Sevilla viene colgando desde hace cuatro años el cartel de ‘No hay dinero’ cuando se trata, por ejemplo, de invertir en el mantenimiento del muy deteriorado carril bici o de atender las innumerables quejas ciudadanas por la imposibilidad para acceder a un alquiler social, a la hora de alcanzar acuerdos económicos con la Iglesia la política de austeridad se vuelve milagrosamente flexible. Tanto, que acaba de garantizar más de 420.000 euros al Arzobispado de Sevilla para restaurar una de sus parroquias.
Uno de los indignados es la asociación vecinal del casco norte ‘La Revuelta’, que formulará en los próximos días una denuncia ante la Fiscalía a fin de que “se depuren las responsabilidades penales” con motivo de la firma, entre el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido (PP), y el Arzobispado de un contrato de patrocinio a través de la empresa pública de aguas Emasesa en virtud del cual ésta destinará 423.500 euros “para realizar trabajos de arqueología, restauración de las fachadas y del interior” de la iglesia de Santa Catalina.
Esos y otros argumentos han sido esgrimidos por ‘La Revuelta’ en una nota pública muy dura con el Ayuntamiento. En su comunicado la asociación critica con severidad que una empresa municipal destine fondos públicos “para pagar a terceros particulares por acciones que se desvían o son ajenos a su objeto social, utilizando instrumentos tan impropios como un contrato de patrocinio para restaurar un bien privado”. “Es corrupción política y entendemos que, además, se dan indicios de que pudieran ser constitutivos de corrupción penal”, apuntan en la nota, que ha recogido Europa Press.
LA VERSIÓN MUNICIPAL
Mientras tanto, el Ayuntamiento de Sevilla explicaba en un comunicado que “entre los objetivos de la Archidiócesis de Sevilla se encuentra la conservación, estudio y puesta en valor del patrimonio histórico, cultural y artístico de la Iglesia católica en el municipio de Sevilla, cuyo desarrollo se instrumenta a través de convenios, contratos de patrocinio y otros instrumentos de financiación”. Por esa razón, “desde Emasesa se destinarán 423.500 euros en concepto de patrocinio para realizar trabajos de arqueología, restauración de las fachadas y del interior del mencionado templo, hasta la puesta en valor de los elementos arqueológicos y arquitectónicos hallados en las excavaciones arqueológicas realizadas en el mismo”.
Ese dinero sería en realidad la primera entrega de los 1,5 millones de euros que el alcalde popular comprometió el diciembre de 2014 firmando un generoso protocolo de intenciones con el arzobispo, José Asenjo.
El pago de la cantidad de 423.000 euros comprometida por el Ayuntamiento de Sevilla se hará en dos plazos: “El 50%, 175.000 euros, se abonará en el plazo de 15 días a contar desde la firma del presente contrato. El 50% restante, 175.000 euros, se abonará una vez se haya acreditado por la Archidiócesis de Sevilla, la realización de la actividad publicitaria de Emasesa que obliga el contrato firmado”.
‘UN PASTIZAL’
Por su parte, ‘La Revuelta’ interpreta que haber firmado el contrato a escasos días de las elecciones municipales –que se celebran este domingo– suena a “expolio de fin de etapa”. “El alcalde suma un nuevo ‘Zoidorefrán’, ‘para lo que me queda en el convento dejo al obispo contento’”, han ironizado desde la asociación vecinal.
Finalmente, han calificado de “absolutamente inmoral” que Emasesa destine “ese pastizal a rehabilitar o publicitar una rehabilitación a la vez que corta suministros a la gente más empobrecida que no puede pagar el recibo del agua”.