Los algecireños acompañaron un año más a su patrona, la Virgen de la Palma, en el oficio religioso concelebrado en su honor y la posterior procesión por las calles del centro de la ciudad, donde la solemnidad marcó el ambiente en el día de la Asunción de la Virgen.
Como cada 15 de agosto, la céntrica iglesia de Nuestra Señora de la Palma se llenó en la misa donde las autoridades locales, encabezadas por el alcalde, José Ignacio Landaluce, renovaron el voto de fidelidad en la patrona y alcaldesa perpetua de la ciudad.
La función principal, presidida por el reverendo Jesús Casado, párroco de la Palma y director espiritual de la hermandad, comenzó puntual a las siete y media de la tarde y contó con la presencia del hermano mayor, José María Villa, así como del hermano mayor de la hermandad ceutí de la Virgen de África, José María Fuentes, entre otros representantes cofrades.
En torno a las ocho, tras los ruegos a la Virgen, el alcalde subió al altar y pidió a la patrona por una ciudad más próspera y solidaria en la renovación del voto. «Tu pueblo te honra. Te pedimos que sigas cuidando de nosotros y que veles por Algeciras. Poco a poco dejamos atrás los malos tiempos, pero aún son muchas las familias que necesitan nuestro apoyo. Pedimos trabajo, que la alegría reine en todas las familias», rogó el alcalde, quien también pidió por los ancianos, emigrantes y por todos los necesitados. Sobre los emigrantes, apuntó que Algeciras es una ciudad hospitalaria y pidió por seguir siendo un lugar justo, tolerante e igualitario. «Que Algeciras, tu Algeciras, Madre, siga creciendo», concluyó Landaluce.
Con posterioridad a la eucaristía, la talla partió en procesión. En su salida estuvo arropada por cientos de personas que, congregadas en la Plaza Alta, se sumaron al recorrido desde el templo pasando por la Plaza Alta, Alfonso XI, Blas Infante, Sevilla, San Antonio, Regino Martínez, Muñoz Cobos, Santísimo, Plaza Alta y regreso al su templo. La primera levantá, ante las puertas de la misma iglesia, corrió a cargo del hermano mayor ceutí, dado el hermanamiento existente con la Palma. Uno de los momentos clave del desfile, que ganó en solemnidad y belleza con la llegada de la noche, tuvo lugar a la altura del monumento a la patrona en Blas Infante, donde se hicieron nuevas ofrendas y peticiones a la Virgen.
Foto de la web del Ayuntamiento de Algeciras.
