Ante las declaraciones de la Delegada de Educación sobre la visita del Obispo de Córdoba a centros de educación públicos de la provincia, aparecidas el 6 de Abril en la prensa, la asociación Córdoba Laica quiere manifestar lo siguiente:
a) Hace varias semanas solicitamos de esa Delegación las explicaciones oportunas sobre los objetivos y el desarrollo de dichas visitas, sin que hasta el momento hayamos tenido respuesta.
b) Las declaraciones que hemos leído en la prensa de la señora Delegada de Educación, dando explicaciones a preguntas de Izquierda Unida, nos parecen impropias de una responsable de un Estado aconfesional , máxime cuando tiene la responsabilidad de los centros públicos de educación, por lo siguiente:
1- Equiparar la participación de cargos públicos electos en actos institucionales o formativos en los centros educativos, casi siempre a petición de éstos, con la de jefes religiosos, a iniciativa propia, y con claros objetivos proselitistas, deja clara la idea de “democracia religiosa, católica en este caso” de la señora Delegada. Que el alumnado conozca el funcionamiento del sistema democrático, las opciones y las propuestas de los distintos partidos políticos debe ser parte del programa educativo para la formación de ciudadanos y ciudadanas en todos los centros educativos.
2- Confirmar que “transmitió” de manera general, como circular, el deseo del obispo de visitar los centros , indica en sí mismo una subordinación de la Delegación a una determinada confesión religiosa.
3- Proponer que la mayoría del Consejo Escolar decida sobre la realización de una actividad con marcado carácter catequista de una determinada organización religiosa, aunque fuera mayoritaria entre las personas del centro, no solo es un ataque a la aconfesionalidad del Estado, sino un desprecio a la libertad de conciencia, que es el derecho más fundamental del ser humano.
4- Favorecer este tipo de proselitismo ejercido sobre menores indefensos, obligados a permanecer en el centro, al margen de la opinión de sus propias familias, atenta contra el derecho de los menores a ser respetados y a no ser adoctrinados.
5- Permitir y dar instrucciones para que estas actividades de adoctrinamiento se realicen en horario lectivo, restando tiempo a la necesaria formación científica y general, en una de las regiones peor paradas de Europa en los test de niveles de aprendizaje.
d) Entendemos la reacción de las familias que optan por una enseñanza pública en un Estado aconfesional, lo que en el centro de ciudades como Córdoba es una isla rodeada de centros religiosos, aunque pagados con fondos públicos, y que a pesar de ello ven como sus hijos son agredidos en su derecho a la libertad de conciencia.
e) Nos parece increíble estar viendo imágenes que se parecen más al nacionalcatolicismo que a un Estado Democrático.