Un gran incendio ha destruido este lunes un venerado santuario musulmán en Cachemira, bajo el control de la India, causando enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los residentes de esa localidad.
La tardanza de los bomberos en apagar el fuego ha provocado la ira del pueblo. El deplorable acto ha caldeado los ánimos; enfrentamientos y manifestaciones han dejado al menos 40 heridos, entre ellos 10 miembros de las fuerzas del orden.
De acuerdo con las fuentes policiales, el fuego inició en el piso superior en la madrugada y rápidamente envolvió la estructura de madera del santuario, sita en el centro de Srinagar, principal ciudad de la región administrada por la India.
Los oficiales de la policía han bloqueado las calles que comunican a ese santuario; sin embargo, manifestaciones y protestas han tenido lugar en otras zonas y los enfrentamientos continúan.
Las fuerzas de seguridad han utilizado gases lacrimógenos y han lanzado disparos al aire para dispersar a los manifestantes.
Hasta el momento, no hay información sobre las causas del incendio de uno de los sitios más reverenciados en la Cachemira india, que alberga una reliquia del santo sufí del siglo XI, el jeque Abdul Qadir Gilani.
