Las ya habituales sanciones por manifestarse de manera pacífica acercan a España a un Estado policial
Antonio Aramayona, un antiguo profesor de instituto ha sido multado con 300 euros simplemente por realizar una protesta pacífica contra los recortes en Educación frente al domicilio de la consejera, Dolores Serrat, en Zaragoza. Los casos de ciudadanos multados en diferentes puntos del país, por el solo hecho de hacer uso a su derecho a protestar se están convirtiendo peligrosamente en algo habitual e impropio en un Estado de Derecho.
Dos horas diarias delante del portal de la consejera
La Delegación del Gobierno en Aragón ha comunicado al profesor de la multa por situarse dos horas diarias durante 120 días ante el portal de la consejera. Según explica él mismo en su blog Diario de un perroflauta motorizado, ha recibido una carta en la que le explican que la multa es por su “negativa a abandonar el portal de la consejera de Educación a requerimiento de los agentes denunciantes, el día 23 de octubre”. Ese día fue el de la huelga convocada por el Sindicato de Estudiantes y, Aramayona aclara que la Policía le pidió que se retirara del lugar donde se manifestaba porque “tenemos que montar un puesto de vigilancia”.
Escribirá una carta al delegado
El exprofesor de Filosofía, al que no falta sentido del humor, escribe en su blog que piensa enviar un escrito al delegado del Gobierno, Gustavo Alcalde, para explicarle sus razones, “con la esperanza de convencerle hasta tal punto que el delegado mismo, racionalmente persuadido, acabe también en el portal con alguno de los carteles que gustosamente le prestaríamos”.
La Chunta Aragonesista le ofrece asesoramiento
Antonio Aramayona narraba así este lunes el momento en el que se encuentra su caso: “El Delegado del Gobierno me comunica “iniciar expediente sancionador y me da quince días de plazo para presentar alegaciones., etc. Si no efectúo alegaciones o me declaro culpable, el asunto se convierte en Propuesta de Resolución y se me impone una sanción de 200 €. Mañana [por el martes] tendremos en el portal de la Consejera una entrevista con una abogada cuyos servicios y asesoramiento Chunta Aragonesista nos ha ofrecido amablemente”.
Un héroe que ya no es anónimo
Aramayona se ha convertido en un personaje incómodo para el Gobierno regional, ya que su perseverancia –cuatro meses, dos horas diarias ante el domicilio de la consejera- le ha convertido en un héroe ante los ojos de muchos ciudadanos, que acuden para saludarle e, incluso, hacerse una foto junto a él y los carteles que va renovando de manera periódica, según se cuenta en el blog El Ventano.
Las multas en Madrid
Desafortunadamente, el caso del profesor no es el único en el que se imponen multas a los ciudadanos por ejercer su derecho a manifestarse. En abril pasado, la Delegación del Gobierno en Madrid impuso multas a 18 participantes en el escrache realizado contra la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría; algunas de ellas por falta grave, sancionadas con 1.500 euros.
Multas en Galicia a afectados por las preferentes
En octubre pasado, en Galicia, una decena de afectados por las participaciones preferentes de la plataforma del Baixo Miño fueron multados por sus protestas: 7.600 euros a pagar entre 12 personas.
Estado policial en Castilla-La Mancha
En Castilla-La Mancha, salir a la calle a protestar contra la política de recortes de Cospedal puede salir, literalmente, caro. Según han denunciado el PSOE, IU, además de movimientos ciudadanos y sindicatos, en Ciudad Real, por ejemplo, se amenaza con multas de entre 300 y 30.000 euros por abuchear o protestar por la presencia de la presidenta autonómica.
El profesor Antonio Aramayona rodeado de jóvenes durante su protesta. Foto: Blog El Ventano
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