Un año más las autoridades han participado en representación de toda la ciudadanía en un acto confesional católico: la ofenda floral a la virgen de las Angustias, que oficialmente sigue manteniendo el título de patrona de Granada. Todo ello acompañado de gastos a cargo del municipio, del ejército que tira pétalos desde helicópteros militares, desfile de funcionarios policiales, bomberos,… Toto a mayor gloria de la patrona a costa del contribuyente obligado a costear las fiestas religiosas de una parte de la ciudadanía. El nacional catolicismo del siglo XXI
Abre el acto el arzobispo
Le sigue el alcalde de la ciudad (José Torres del PP)
La Diputación Provincial
El Ejército
La Guardia Civil
El Ayuntamiento no escatima medios y lleva a la Policía Local de gala a caballo, o motorizada.
Siguen con la ofrenda los altos cargos policiales, el superintendete y el concejal de seguridad
Desde su tribuna, las autoridades rodean al arzobispo, que copreside con el alcalde, no se pierden detalle y saludan a los parraquianos.
Al final todo son saludos y abrazos, incluidos los concejales del PSOE, que también acuden al acto, no vayan a perder algún voto por la virgen.
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