Vestidos con delantales blancos, agentes del ministerio de Prevención del Vicio y Promoción de la Virtud patrullan el barrio, escoltados por guardias armados para velar por el respeto de la prohibición
Rodeados de cientos de rosas rojas, los floristas de la capital de Afganistán y los jóvenes vendedores de globos en forma de corazón están desesperados después de que el régimen talibán prohibiera festejar el Día de los Enamorados.