El líder religioso dejó a su esposa cuando esta descubrió que ya estaba casado
Una mujer de nacionalidad española residente en Alicante denunció el pasado jueves a su marido, el imán de la principal mezquita de Lleida, Abdelwahab Houzi, por poligamia y malos tratos. La denunciante, Aicha López, desconocía al casarse que el líder religioso tuviera otra mujer en Marruecos. Cuando lo descubrió, el imán la abandonó, según describió en su denuncia a la Guardia Civil. Houzi negó todas las acusaciones, según relata el diario Segre.
La esposa del imán descubrió la realidad familiar de su marido durante un viaje que la pareja hizo a Marruecos el pasado febrero para conocer al padre de Houzi. "Viajamos por Casablanca y Marraquesh y cuando estábamos en Rabat recibió una llamada de su primera mujer, con la que tiene cinco hijos. Entonces me pidió que me bajara del coche y que volviera a España sin él", describe López, que asegura que hubo un forcejeo durante el cual el imán le rompió las gafas y el teléfono móvil. "Me dejó tirada en Rabat", añade.
La denunciante asegura que desde entonces no se han vuelto a ver. López ha emprendido acciones legales con el fin de obtener el divorcio y recuperar sus pertenencias. Según ella, la intención del imán es viajar a Arabia Saudí próximamente, por lo que espera que la denuncia impida la huida de su marido. La poligamia está penada en el Código Penal español con prisión de entre seis meses y un año.
La mezquita donde ejerce el imán denunciado, situada en la calle de Nord, es la más numerosa de Lleida. La asociación de ciudadanos musulmanes Arab Atlas, citada por el periódico ilerdense, asegura que en ese centro se celebran impunemente "matrimonios de placer". Las mujeres "no saben que no tiene validez legal y Houzi les dice que no pueden separarse de sus maridos", denuncia el portavoz del colectivo, Omar Charah.
Juicio por lapidación
Por otra parte, el magistrado del juzgado número 1 de Tarragona no pudo tomar declaración ayer a una mujer que supuestamente sufrió una condena a lapidación en una masía en Valls (Tarragona) hace más de un año. La víctima, que denunció a nueve personas de origen magrebí, no acudió al tribunal.
El suceso salió a luz en marzo de 2009. La mujer denunció ante los Mosso dEsquadra que había escapado de una lapidación a muerte tras ser raptada. En la masía, había sido sometida a un supuesto juicio regido por la versión más radical de la religión islámica, que la acusó de adulterio. La mujer escapó y lo denunció.
El juzgado de Tarragona encargado de investigar el caso había mandado un requerimiento a un juzgado de Marruecos, donde vive la denunciante, para que acudiera a declarar, pero la mujer no se presentó. Los supuestos culpables están en libertad con fianza.