La manifestación, que no se ha llegado a celebrar, estaba motivada por la homilía de Navidad en la que el arzobispo de Granada criticó la nueva ley del aborto con alusiones a la violencia machista
Fieles de Córdoba y Málaga han arropado al arzobispo de Granada en la catedral granadina ante el anuncio de una cacerolada, que no se ha llegado a celebrar en protesta por su homilía de Navidad en la que criticó la nueva ley del aborto con alusiones a la violencia machista.
En la eucaristía que ha celebrado este mediodía, el arzobispo de Granada, Francisco Javier Martínez, ha agradecido el gesto de las familias y grupos de fieles provenientes de municipios como Málaga, Hinojosa del Duque y Pozoblanco (Córdoba), y ha interpretado su presencia como un apoyo a la Iglesia en su conjunto.
En su homilía de Navidad, monseñor Martínez dijo, en alusión a la nueva ley del aborto, que 'matar a un niño indefenso, y que lo haga su propia madre, da a los varones la licencia absoluta, sin límites, de abusar del cuerpo de la mujer porque la tragedia se la traga ella', lo que se interpretó en algunos sectores sociales como una justificación de los malos tratos contra la mujer.
Asociaciones de mujeres y colectivos de toda España han criticado sus palabras en grupos y foros de Internet, y una página web de la red social Facebook contra el arzobispo de Granada ha recibido miles de apoyos en los últimos días, en los que también surgió la idea de convocar una cacerolada en la catedral.
La cacerolada no ha llegado a producirse, pero, ante su anuncio, grupos de fieles, muchos de ellos de otras provincias y pertenecientes a movimientos cristianos como el Camino Neocatecumenal, han llenado la catedral de Granada, donde numerosas personas han tenido que permanecer de pie por falta de espacio en los bancos.
Martínez ha defendido el matrimonio cristiano y el 'significado pleno de lo masculino y lo femenino'.
Tras la polémica de Navidad, el arzobispo hizo público un comunicado en su página web en el que pidió disculpas por lo que consideraba una mala interpretación de sus palabras y expresó su 'más profundo rechazo y total oposición a cualquier tipo de malos tratos y de violencia física, verbal o psicológica, contra las mujeres y contra cualquier ser humano'.