El juez que instruye la causa le obliga a comparecer en el juzgado cada 15 días y a mantenerse alejado del centro educativo
El profesor de música y ética del colegio concertado religioso Valdeluz (Madrid), Andrés Díez Díez, quedará en libertad a lo largo de hoy después de que el magistrado que instruye su causa haya firmado un auto en el que revoca la prisión provisional comunicada y sin fianza que le impuso tras ser detenido, según han informado fuentes judiciales. El juez Hermenegildo Barrera ha aceptado la propuesta de su abogado defensor, Ramón Muñoz, pero le impone la obligación de acudir a firmar cada 15 días y a mantenerse alejado del centro educativo.
El profesor tendrá que presentarse los días 6 y 20 de cada mes en el juzgado más próximo a su domicilio para firmar. También se le ha retirado el pasaporte para evitar que se pueda marchar de España, según fuentes judiciales. Su abogado ya explicó la semana pasada que no existían los requisitos que recoge la Ley de Enjuciamiento Criminal para mantenerlo en prisión, como la reiteración delictiva, la posible destrucción de pruebas o el riesgo de fuga.
Andrés Díez Díez está acusado de haber cometido una decena de abusos sexuales entre las alumnas del colegio de los Agustinos Valdeluz, en el barrio del Pilar en Madrid, y en la escuela de música privada Melodía Siglo XXI. Según las denunciantes, aprovechaba las clases particulares, en especial las de piano, y las tutorías para someter a tocamientos a las estudiantes, con edades que van desde los 12 a los 17 años.
El número de denuncias ha ido aumentando en las últimas semanas, después de que diversas víctimas acudieran a la policía a explicar lo que les había sucedido durante su época como alumnas en el Valdeluz. Los policías citaron a varias mujeres, algunas ya mayores de edad, que ratificaron los posibles abusos. Siempre actuaba supuestamente de la misma manera. Esperaba a estar a solas con las niñas para someterlas a abusos, como tocamientos en partes íntimas.
Nada más ser detenido por los agentes del Servicio de Atención a la Familia (SAF) de la Jefatura Superior de Policía de Madrid y pasar a disposición judicial, el magistrado que instruye el caso, el titular del número 13 de plaza de Castilla, decretó su ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza el pasado 14 de febrero dada la gravedad de las acusaciones que pesaban sobre él y la posibilidad de reiteración delictiva como profesor de sendos centros.
El caso más polémico fue el de una alumna de 17 años que acudió al Centro de Intervención para Victimas de Abusos Sexuales (CIASI) de la Comunidad de Madrid. Una vez terminado el tratamiento, sus padres no quisieron denunciar ya que según explicaron la letrada del centro les dijo que el proceso iba a ser muy largo y que no iban a creer a su hija. Pero tampoco lo hizo el propio Gobierno regional, que ni siquiera informó a la fiscalía de Madrid.
Junto con el profesor, también fueron detenidos el director del Valdeluz, Eustaquio Iglesias, y el jefe de estudios, Juan José de Cossío, cuando este último declaró ante al policía que ya conocían de los supuestos abusos sexuales de Díez desde hacía años. Ambos quedaron en libertad con cargos tras prestar declaración ante Hermenegildo Barrera. El abogado de estos imputados va a pedir la semana próxima el archivo (sobreseimiento) de la causa para sus defendidos, ya que, en su opinión, no existen causas reales que permitan mantener la acusación.
