Unos sesenta jóvenes militantes celebraron este sábado en París el día de la mujer con dos días de adelanto, cubriendo con un burka (velo islámico integral) gigante la estatua que simboliza la República francesa, a modo de denuncia.
Los manifestantes, pertenecientes a la asociación "Ni putas ni sumisas", organizaron un desfile en círculo, mostrando pancartas que decían "Ni velo ni burqa", "servicio público = aborto y contracepción".
Un poco más tarde, los manifestantes cubrieron simbólicamente la estatua con un burka negro gigante, para protestar contra lo que consideran un retraso en la votación de una ley de prohibición del velo islámico integral en los lugares públicos.
"Hemos querido denunciar lo intolerable, pedimos que no se entierre la cuestión de la ley sobre el burka", declaró a la AFP Sihem Habchi, presidenta de "Ni putas ni sumisas".
"Este burka de color negro, de nueve metros de altura, ha sido retirado" una hora más tarde "por las fuerzas del orden", precisó.
"Hemos querido llamar la atención de todos los movimientos feministas para decirles que sin laicismo no hay feminismo", añadió la presidenta de la asociación.
En enero, una misión parlamentaria recomendó que Francia se pronuncie solemnemente contra el velo integral islámico y tome medidas, bien mediante una reglamentación, bien mediante una ley, para prohibirlo en los hospitales, administraciones y transportes públicos. El gobierno, sin embargo, aún no se ha pronunciado.