Los obispos españoles no están contentos con el PSOE. A pesar de que se mostraban exultantes tras la aprobación de un nuevo modelo de financiación muy ventajoso para la Iglesia, no están dispuestos a ceder un ápice en la parcela de educación en la que siempre se han movido a sus anchas. Y lo que les tiene especialmente indignados es la asignatura “Educación para la Ciudadanía” que comenzará a impartirse en los colegios españoles a partir del curso académico 2007/2008 y será evaluable.
Los planes
Según informaciones recogidas por El Confidencial Digital, la Conferencia Episcopal tiene la intención de convocar a 200 expertos para que el próximo día 17 de noviembre participen en una jornadas que diseccionarán dicha materia incluida en la Ley Orgánica de Educación (LOE). El objetivo final del encuentro es elaborar un informe que facilite argumentos a los católicos frente a los malévolas ideas contenidas en esta asignatura que funcionará, según los obispos, de “adoctrinamiento laicista”. Para lograrlo convocan a políticos, empresarios, docentes, sociólogos y clérigos. La cifra de prelados rondará los 60.
El camino
Una de las vías de contestación a esta asignatura es la objeción de conciencia. La jerarquía eclesiástica ya ha realizado un llamamiento a los padres para que se acojan a esta posibilidad. Mediante la reunión anunciada lo que se pretende es explicar con detalle a las familias cómo pueden hacerlo. De hecho existe ya un libro que orienta a los padres en esta alternativa.
Puntos calientes
Los alumnos españoles se educarán en los valores cívicos al menos en tres cursos tanto en primaria como en secundaria. Al parecer, los obispos españoles consideran inadmisible que los niños conozcan sus derechos, el reconocimiento y estima de las diferencias de género, los hábitos cívicos, la diversidad cultural y religiosa o los principios básicos de nuestra Carta Magna. Ya en la adolescencia lo peligroso es que tengan conocimientos sobre sexualidad, la división social, la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el respeto a las elecciones laicas y religiosas, el funcionamiento de los regímenes democráticos, el racismo o el cuidado de la naturaleza entre otros temas. Ya en cuarto curso de la ESO, bien maduritos, verán el lado oscuro a través de un mayor conocimiento de la globalización, el pluralismo moral o el siempre peligrosísimo análisis de la información en prensa. Todo un conjunto de enseñanzas por las que logramos entender que la Iglesia se sienta amenazada.