El escándalo por los supuestos abusos sexuales a manos de los responsables de la casa de acogida Cruz Blanca de Córdoba suma un tercer encausado. Un antiguo trabajador del centro fue citado ayer a declarar ante el juez instructor. El nuevo imputado, identificado como S. R. D., era un cuidador laico del turno de noche que se desvinculó hace tres años de la Casa San Francisco de Asís
Varios de los testigos citados ayer reiteraron la inocencia de los implicados, insistiendo en que, si acaso, pudieron propinar algún cachete a los internos como reprimenda cuando hacían algo malo. Otra de las trabajadoras incluso apuntó a la «gran imaginación» de los discapacitados, «que han podido fantasear si alguien insiste en preguntarles».
La fiscalía mantiene que la investigación y los testimonios de otros trabajadores, e incluso de víctimas, han confirmado que las acusaciones por abusos –limitados supuestamente a tocamientos— «eran veraces». Entre los familiares se extendía la la duda sobre el comportamiento de los dos religiosos, como manifestó algún padre a los periodistas. En el 2009 un postulante de la congregación fue encarcelado por supuestos abusos sexuales a un interno.
