La Masonería española que representamos manifiesta su apoyo a todos los colectivos sociales que trabajan para conseguir que el Estado español sea realmente laico. Un Estado donde todos los ciudadanos y entidades, laicas, religiosas u otras, puedan disfrutar de los mismos derechos, deberes y oportunidades, y en el que la vida pública se desenvuelva dentro de un marco legal y operativo plenamente aconfesional.
Asimismo, reclamamos al Gobierno que se establezcan condiciones de igualdad para las distintas iglesias y confesiones y, a su vez, que denuncie y no renueve el Concordato con el Vaticano con el fin de concluir con compromisos del Estado con una Iglesia específica, en especial en cuanto a su financiación, y para que ninguna religión mantenga vínculos de dependencia e interferencia respecto a la organización del Estado como tal.
La sociedad española es lo suficientemente madura para liberarse de las ataduras que le impone un pasado de confluencia, cuando no de identificación, entre Estado e Iglesia Católica. Por eso, como integrantes de la Masonería, respetuosa con todas las religiones y que tiene como uno de sus objetivos la armonía social entre todos los seres humanos, en libertad y respeto mutuo, entendemos que ha llegado el momento de superar definitivamente ese pasado en España y de llevar a cabo, por parte de los poderes públicos, la total laicidad del Estado para fortalecer la convivencia cívica y democrática, sin privilegios ni discriminaciones.
En Madrid a 28 de enero de 2008