Remiten una carta a la Mesa en la que recuerdan a los diputados que la institución «ocultó, silenció y encubrió» los abusos de dos monjes
El mismo día que la Conferencia Episcopal presentó unilateralmente su polémico plan para indemnizar a las víctimas de abusos sexuales, una hoja de ruta que no cuenta con el apoyo del Gobierno ni con la participación de las asociaciones de víctimas, el Parlament de Catalunya decidió otorgar la medalla de oro a la abadía de Montserrat, una de las instituciones religiosas donde al menos 14 niños sufrieron agresiones sexuales, escándalo que, según los afectados, sus dirigentes «ocultaron y encubrieron».