El próximo 20 de enero el Parlamento Europeo debatirá varias propuestas a favor y en contra de la Sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que prohibía la presencia de símbolos religiosos en los centros escolares.
Estimado/a Sr/a:
En referencia al debate sobre la aplicación de la sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que obliga a retirar los crucifijos de una escuela pública de Italia y las propuestas de pronunciamiento del Parlamento Europeo para aplicarla en todos los países miembros, quiero hacerle llegar mi convicción de que la presencia de símbolos religiosos en espacios públicos es anacrónica, insolidaria y constituye una afrenta a la libertad de los ciudadanos.
Por ello, entiendo que el Parlamento Europeo debería aprobar la aplicación de dicha doctrina a todos los países miembros, que redundará en un avance en la deseable separación entre iglesias y Estados y aumentará los niveles de emancipación y libertad de todos los ciudadanos.
Los símbolos religiosos, salvo los que ya están incorporados en la simbología oficial, no representan la identidad nacional de ningún país europeo y no son un factor de cohesión, sino de separación y enfrentamiento. Su permanencia sólo puede defenderse desde postulados xenófobos y excluyentes.
Espero que a la hora de decidir su voto tenga en cuenta estas consideraciones y contribuya al avance de la democracia y las libertades, en la línea de la mejor tradición europea.
Atte.
http://www.europarl.europa.eu/members/expert/groupAndCountry/search.do?language=ES&country=ES