Presionar al gobierno de Cameron para que deseche la idea de legalizar los matrimonios homosexuales. Este es el objetivo de Antonio Menini, arzobispo británico y nuncio del papa en el Reino Unido. Para conseguirse se ha puesto en contacto con los líderes religiosos de las comunidades musulmanas y judias y el objetivo es aunar esfuerzos de todas ellas y conseguir que el gobierno retire la propuesta.
La ministra de igualdad Lynne Featherstone ha lanzado un debate consulta pública sobre cómo introducir en la sociedad británica los enlaces de personas del mismo sexo . El consejo musulmán británico lo calificó de innecesario y poco efectivo y los imanes de Glasgow fueron más lejos calificando los matrimonios del mismo sexo, un ataque a su fe y a sus creencias fundamentales.
Entre los judíos la opinión esta más dividida. Esta comunidad en su facción liberal y reformista, ha apoyado los matrimonios gays, pero los rabinos han expresado su oposición y dicen que va directamente en contra de los valores religiosos del judaísmo.
Dirigiéndose a las iglesias de Inglaterra y Gales, el arzobispo Mennini ha advertido que se enfrentan a una campaña larga y difícil y que por eso no descarta pedir ayuda y apoyo a las personas de otras fes.
De momento no ha habido contacto formal, pero podría haberlo en un futuro próximo. Lo cuenta hoy el diario The Telegraph.
