El Ministerio de Educación de la provincia de San Juan consideró como “inasistencias justificadas” las de aquellos estudiantes que acudieron a una marcha contra el matrimonio homosexual promovida por la Iglesia Católica.
La batalla por el matrimonio entre personas del mismo sexo en Argentina ha escrito por estos días un capítulo tristemente insólito que deja al descubierto la notable influencia de la Iglesia Católica en algunas provincias del país.
En San Juan, una provincia conservadora ubicada en el límite con Chile, el Ministerio de Educación local emitió un polémico comunicado señalando que los escolares que faltaran a la escuela para ir a una marcha contra el matrimonio gay tendrían su falta “justificada”.
En sintonía con esa disposición, se emitió otra similar para que los empleados públicos de la ciudad de San Juan pudieran sumarse a la manifestación “antigay”, impulsada por la Iglesia Católica local.
Según publicó el diario Perfil, algunas escuelas católicas sanjuaninas habrían presionado a los alumnos –y a los padres de éstos- para que concurrieran a la manifestación, que el sábado congregó a unas 30.000 personas, según los organizadores.
"Movilizan pibes de 8 años por algo que ni saben de que se trata. Algunos colegios están tomando lista para que vayan a la marcha los chicos. Obligan a que los chicos junten firmas en contra del matrimonio", denunció Fernando Baggio, activista a favor del matrimonio gay.