El consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía en la primera Jura de Bandera Civil frente al Santuario de la Virgen del Rocío, “como vínculo entre la fe de los andaluces y los españoles”
La aldea de El Rocío ha vivido este sábado un día histórico con la celebración de la primera Jura de Bandera Civil organizada por el acuartelamiento aéreo de Tablada. Nunca antes se había visto una estampa igual frente al emblemático Santuario almonteño, en el Mirador de la Marisma.
La Jura de Bandera ha contado con la presencia de Antonio Sanz, consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía, quien ha puesto en valor la Jura como “un acto de unión y respeto para expresar lealtad en un rincón especial en Andalucía como es la aldea de El Rocío”.
Sanz apela a la “unidad de los españoles” en el Juramento de Fidelidad a la Bandera Nacional en El Rocío
Antonio Sanz ha manifestado “el compromiso con España, la unidad y la bandera”, durante su participación este acto pionero en la aldea de Almonte. El Consejero ha resaltado también el símbolo de “unión” de la Virgen del Rocío, “como vínculo entre la fe de los andaluces y los españoles”. Así, ha trasladado su emoción en un día “para mostrar orgullo por España y por el juramento de fidelidad a su bandera, fusionado con la fe en la Virgen del Rocío”.
Asimismo, Sanz ha expresado que “ha sido una suerte poder compartir este acto junto a los componentes del Ejército del Aire, de la Hermandad Matriz de Almonte, y las más de 60 hermandades que han estado presentes, así como las autoridades”. En este contexto, también ha querido felicitar al Ayuntamiento de Almonte, la Hermandad Matriz, las Fuerzas Armadas y al Ejército del Aire por “el éxito rotundo de la organización”.
Por último, ha manifestado que “este sábado gran parte de Andalucía ha trasladado su apoyo a la unidad de España y a su bandera”. “Y todo eso desde un marco incomparable como es la Ermita del Rocío que ha congregado a tantos peregrinos para besar la bandera y mostrar fidelidad y juramento a las misma”, ha concluido.
720 personas han jurado bandera en El Rocío
Igualmente, la Jura de Bandera Civil estado presidida por el teniente general Enrique Jesús Biosca Vázquez y ha sido organizada por el coronel Juan José Arbolí Nevot, Jefe del Acuartelamiento Aéreo de Tablada. En total, han sido 720 las personas que han jurado bandera en el icónico destino rociero.
El número de jurandos para este acto se estableció en 720, según indicó el Ministerio de Defensa, que, además, amplió el plazo de inscripción del 27 de febrero al 5 de marzo, aunque desde el Ayuntamiento de Almonte se señaló que el límite de participantes sería de 800. Así lo confirmó el alcalde de la localidad, Francisco Bella, en un vídeo que publicó la administración local en sus redes sociales en las que el regidor hacía un llamamiento a la población invitando a que participasen en un acto que calificó de “histórico”.
Además, cuando se abrió el plazo de inscripción informó de que para las personas empadronadas en Almonte, El Rocío y Matalascañas, el Ayuntamiento estaba recepcionando de manera presencial esas solicitudes a través del Servicio de Atención al Ciudadano (SAC), presentando una copia del DNI. Los requisitos que se establecieron para participar en la Jura de Bandera civil de El Rocío fueron los de tener la nacionalidad española y haber cumplido la mayoría de edad.
Una gran expectación
La Jura de Bandera en El Rocío ha suscitado una gran expectación. Desde ayer el Ayuntamiento de Almonte compartía en sus perfiles sociales el ensayo previo en la aldea.
La Jura de Bandera es una promesa que se hace por voluntad propia para defender los intereses colectivos del país. Según algunos estudios, se trata de un acto que tiene su origen en la Antigua Roma en la que se celebraba una ceremonia para tomar juramento a quien entraba en el ejército. En España existen testimonios de estos actos desde la Edad Media, en tiempos de la Reconquista, en los que mediante el juramento se creaba una relación que no se daba entre el Rey y un súbdito cualquiera, pues el soldado pasaba a percibir del monarca un sueldo y armas y estaba obligado a defenderle a él y a su reino. Con el paso de los siglos, la ceremonia se ha ido adaptando al tiempo actual, pero mantiene su esencia, si bien ya es accesible también para el personal civil.