Asóciate
Participa

¿Quieres participar?

Estas son algunas maneras para colaborar con el movimiento laicista:

  1. Difundiendo nuestras campañas.
  2. Asociándote a Europa Laica.
  3. Compartiendo contenido relevante.
  4. Formando parte de la red de observadores.
  5. Colaborando económicamente.

Un Pesebre no hace Navidad. El confesionalismo del gobierno de Chile

Esta navidad, como ya es tradición, el Gobierno de Chile instaló en sus patios un gigantesco pesebre que representa el mito del nacimiento de Jesús relatado en la Biblia. Esta escena de escala a tamaño real, que le costó a nuestro Estado la no despreciable suma de 15 millones de pesos el año pasado, fue elegida como el símbolo de la navidad, pasando a llevar el espíritu laico que debiera imperar en una república democrática como la nuestra.

No hay Estado laico. Eso está claro. Pero además de esa derrota constante, nuestras autoridades tampoco tienen la habilidad de leer lo que la sociedad vive y siente durante las fiestas de fin de año. Para la mayoría de las personas estas fechas significan unidad y alegría en familia, compartir una comida especial y regalar a los niños un juguete y a los adultos un presente que simboliza cariño y respeto.

Las grandes tiendas, nuestras casas y la mayoría de los espacios que no son “estatales” o “fiscales”, no adornan ni simbolizan esta fecha con enormes pesebres del medio oriente. Lo que vemos es lo que realmente simboliza estas fechas, los pinos nórdicos de la fiesta pagana del cambio de estación. El hombre de buen corazón que entrega regalos a los niños. La navidad, esa fiesta pagana de la que se colgó el cristianismo, como lo ha hecho con otras tantas fechas, se impone a la invención de un nacimiento divino en el que se cree cada vez menos.

Citando al obispo de Temuco Héctor Vargas, “se cree más en comprarse ropa amarilla para la suerte, que en la salvación que trae Jesucristo”, lo que refleja, no solo la crisis en la que ha caído la iglesia producto de la conducta inmoral e ilegal de algunos de sus miembros, sino que también revela que la sociedad es más laica de lo que nos quieren hacer creer en los patios de La Moneda.

Este año, como los últimos 4 años, la Fundación Sociedad Atea tomará las banderas del laicismo y entregará una carta reclamando por esta actitud clerical. De seguro nuestras autoridades no sacarán el pesebre, es más, lo justificarán, y seguirá pasando mientras la iglesia siga teniendo funcionarios fiscales en el Palacio de Gobierno. Lo que sí se debe dejar en claro es la molestia de miles de chilenos a los que no nos parece que a la navidad la haga un pesebre.

Disfrutemos de estas fechas tal como fueron concebidas por los nórdicos, como un cambio de estación, como un ciclo que se cierra y se celebra por los logros obtenidos y con la esperanza de que nos vaya mejor en el año que está por comenzar.

Que no nos robe la navidad un grupo de moralistas que desde sus púlpitos “criminalizan” a los que pensamos distinto. Que no nos apunten con el dedo aquellos que no tienen ni ética ni moral para levantar la vista en estas fechas de paz y amor. Felicidades a todas las personas de buen corazón, que son buenos simplemente porque les nace y lo hacen para ganar una indulgencia o para salvarse de un castigo eterno. Feliz navidad.

Total
0
Shares
Artículos relacionados
Total
0
Share