El presidente Donald Trump aseguró el viernes a una reunión de líderes cristianos conservadores que su gobierno defenderá las organizaciones religiosas y el regreso a los valores tradicionales estadounidenses, a la vez que atizó sutilmente el fuego que ayudó a encender por los jugadores de fútbol americano que se arrodillan durante el himno nacional.
Trump, el primer presidente en ejercicio que asiste a la Values Voter Summit (Cumbre de Votantes por los Valores), hizo una lista de las promesas cumplidas a los cristianos evangélicos y otros conservadores y prometió volver atrás el reloj de una nación que, dijo, se ha alejado de sus raíces religiosas.
“Cómo han cambiado los tiempos, pero les digo una cosa, están volviendo a cambiar, recuérdenlo”, dijo a la multitud entusiasta.
Observó, como suelen hacer los cristianos conservadores, que hay cuatro menciones del “creador” en la Declaración de Independencia y afirmó que la “libertad religiosa está consagrada” en los documentos fundacionales de la nación.