La ceremonia católica de la mañana dividió a los grupos municipales, de los que solo acudieron al templo patronal Foro, PP y Ciudadanos, mientras que el acto de entrega de las Medallas de Plata los reunió de nuevo en el teatro Jovellanos
Centenares de ciudadanos en ambiente de fiesta patronal con sol, cánticos corales, bendiciones al Cantábrico y gaitas; quince concejales –los de PSOE, Xixón Sí Puede e IU– como protagonistas en ausencia y en discordia, y apenas una treintena de activistas de Asturias Laica con pancartas contra la presencia de autoridades e instituciones en actos confesionales dibujaron hoy la primera parte de la festividad del patrono de Gijón, San Pedro Apóstol al pie del campanario de la Iglesia Mayor de San Pedro Apóstol, pasado el mediodía. Previamente, el templo patronal se había atestado de fieles para asistir a la ceremonia religiosa en la que, tal como había anunciado, la alcaldesa forista Carmen Moriyón encabezó la una representación municipal de su partido, el PP y Ciudadanos y de distintas instituciones y entidades civiles y militares de la ciudad. Como también habían anunciado, PSOE, IU y Xixón Sí Puede se ausentaron, sumándose a la iniciativa de esta última formación, que presentó un escrito oficial pidiendo a Moriyón que se abstuviera de asistir a un acto confesional.
La ciudad había visto como se reactivaba, en los días previos a San Pedro, un debate más o menos presente desde que hace 15 años la Corporación municipal encabezada por los socialistas decretase su carácter festivo. Pero, salvo por lo que las haya podido agitar el viento que soplaba sobre la bahía, las aguas de San Lorenzo se mantuvieron completamente tranquilas durante la silenciosa manifestación de Asturias Laica, a la que se sumó también una representación de los activistas por el empleo y la vivienda, unidos en un Acto Cívico de Reafirmación Laicista, casi totalmente oculta tras la muralla humana de asistentes a la Bendición de las Aguas y la ofrenda del ramo de flores al Cantábrico. Antes de este ritual reinstaurado junto a la festividad hace 15 años, la Asociación de Amigos de San Pedro hizo entrega en el interior del templo de su premio de este año al Colegio de la Inmaculada, regido por los jesuitas.