El cohete portador Soyuz-FG, que transporta la nave tripulada Soyuz MC-05, despegó desde el cosmódromo de Baikonur.
A bordo viajaban el cosmonauta ruso Serguéi Riazanski, el astronauta estadounidense Randolph Bresnik y al astronauta italiano Paolo Nespoli.
Un corresponsal de Sputnik comunicó desde el cosmódromo de Baikonur que Soyuz MS-05 se separó de la tercera etapa del cohete portador.
El director general de la corporación espacial rusa Roscosmos, Ígor Komarov, felicitó a sus colegas estadounidenses y europeos por el lanzamiento exitoso.
“Me gustaría felicitar a los colegas de la NASA (Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio) y de la ESA (Agencia Espacial Europea) por la labor conjunta”, dijo al indicar que los paneles solares de Soyuz se abrieron y ahora se espera el acoplamiento.
Según una tradición posterior a la época soviética, el vuelo recibió la bendición de un sacerdote de la Iglesia Ortodoxa rusa.