Este fin de semana, el exministro Jorge Fernández Díaz ha ingresado de urgencia en el Hospital de la Princesa de Madrid después de sufrir un infarto. Este hecho a sorprendido al Ministerio del Interior, que creía estar bajo la protección de la Virgen del Amor después de haberle dado una medalla: “Esto es alta traición. Peor que Puigdemont. Le vamos a quitar la medalla a la Virgen y nos vamos a poner realistas. Ni una medalla más a las vírgenes. Se la vamos a dar a un santo.”
El ministro actual de Interior, Juan Ignacio Zoido nos dice estar muy afectado por la falta de intervención divina: “Estamos muy decepcionados. Después de tantos años de misa en latín y resulta que la dichosa virgen no entiende que es un sencillo quid pro quo”.
Zoido, después de tomar aire prosigue: “Nosotros éramos muy devotos de las vírgen, le rezábamos un montón. Siempre nos encomendábamos a ella para que intercediera en temas importantes: que declaren nulo el juicio del caso Lezo, que nadie se vaya de la lengua en lo de la Gürtel, que Rajoy se sepa atar solo los cordones de los zapatos…”.
“Y no voy a engañarle” nos dice Zoido “También pensamos que, al darle la medalla, para el día que ya no estemos en este mundo nos guardara una pequeña parcelita en el cielo para que pudieramos recalificar”.
Sin embargo, sin querer eludir lo sucedido, esta misma mañana la Virgen del Amor ha difundido un comunicado para dar a conocer su versión: “Ni por asomo pensaba que algo así le pudiera ocurrir. Después de como gestionó y ocultó la muerte de los 15 inmigrantes en la playa de Tarajal, no pensaba que tuviera corazón”.
