Asóciate
Participa

¿Quieres participar?

Estas son algunas maneras para colaborar con el movimiento laicista:

  1. Difundiendo nuestras campañas.
  2. Asociándote a Europa Laica.
  3. Compartiendo contenido relevante.
  4. Formando parte de la red de observadores.
  5. Colaborando económicamente.

Otro cura que se suma a una larga lista de la pederastia en la iglesia católica

El religioso, de la ciudad de Reconquista, fue denunciado por el supuesto abuso de una nena de 3 años y su hermano de 5. Las sospechas comenzaron por los comentarios que hizo la pequeña a su madre. El director de una escuela provincial fue apresado también por pedofilia.

Un sacerdote de la ciudad santafesina de Reconquista fue apresado por la Agencia de Trata de la provincia, acusado de someter a una niña de tres años y a su primo, de 5. Se trata del párroco de la iglesia Madre María de Dios, de la ciudad cabecera del departamento General Obligado. Néstor Fabián Monzón es un cura de 47 años que está en la localidad desde mediados del año pasado. Ayer se conoció también la detención del director de una escuela cercana a Reconquista, bajo el cargo de abuso sexual de menores.

El cura fue detenido e incomunicado ayer al mediodía, luego de que la madre de una nena de 3 años lo denunciara, ante los comentarios de su hija. “Mamá, el padre Néstor nos dejó tocarle el pito, y no se enojó”, reveló la niña. Las víctimas serían la niña y su primo dos años mayor. Inmediatamente la madre contactó a una profesional para intentar que su hija avanzara en el relato, y luego dijo: “El a nosotros también”, por los manoseos.

El cura de 47 años –que cobró notoriedad en la provincia cuando en 2014 le escribió una carta a la ex presidenta Cristina Fernández, en defensa del molino arrocero de Romang–, llegó a mediados del año pasado a la localidad de Reconquista. Desde entonces, cumple funciones y reside en la parroquia María Madre de Dios, donde habrían sido cometidos los abusos y de donde ayer salió esposado, bajo la lluvia del mediodía. A pocos metros hay casas de pasillo donde reside la abuela de los niños sometidos.

El fiscal Martínez detalló: “La denuncia fue realizada por la madre de la niña en el Centro de Orientación de Víctimas de Violencia Familiar y Sexual de la Unidad Regional 19ª de la policía provincial”.

Tras tomar conocimiento del hecho, “se le dio intervención al psicólogo y médico policial, y se realizaron diversos estudios a la menor, a partir de los cuales se confirmó que sufrió desgarro parcial de su himen y fue contagiada con el Virus del Papiloma Humano (VPH), una enfermedad de transmisión sexual”.

El fiscal adjunto Alejandro Rodríguez dijo a este diario que el acusado será imputado hoy y que el delito de abuso sexual contempla un agravante por tratarse de un representante del culto religioso; pero prefirió no adelantar la imputación formal que le harán esta mañana.

En relación a los abusos de los que habría sido víctima el niño, Martínez aclaró que “se evalúan los pasos a seguir desde la Fiscalía, a raíz de que el progenitor manifestó que no quiere realizar actos legales, ni exponer a su hijo hasta tanto se entreviste con un médico psicólogo particular”.

En tanto, otra investigación –iniciada hace cuatro meses– pesa sobre Lucio Cipré, un hombre de 59 años que dirige la escuela primaria Máximo Vicentín del barrio Padre Celso de la ciudad de Avellaneda y que está acusado de mantener contacto sexual con menores de entre 13 y 17 años, en situación de vulnerabilidad social, una de las cuales está alojada en un hogar. Según trascendió, el hombre contactaba víctimas por Facebook y pactaba encuentros. Ayer fue imputado por el fiscal Rubén Martínez.

El director de la primaria fue detenido el lunes, por la presunta comisión de los delitos de abuso sexual y corrupción de menores.

La denuncia fue concretada por una de sus presuntas víctimas. Su arresto se concretó tras un allanamiento realizado a su vivienda, donde fueron secuestradas una carabina calibre 22 largo con un cargador de nueve proyectiles y una escopeta de un caño calibre 16. Además, ocho celulares, dos pendrive, un módem, dos tarjetas de memoria, ocho chip para teléfonos celulares y una computadora. Es que las primeras informaciones dieron cuenta de que el hombre mantenía contacto vía redes sociales con sus víctimas, todas menores de 17 años. “Los detalles son escabrosos”, confesó una fuente.

“Estamos investigando la relación que mantenía el detenido con dos chicas de 13 y 16 años que son primas”, señaló el fiscal Martínez, a cargo de la investigación. “La menor de 16 años vive en el Hogar de Transición Doña Pina y, según informes de la institución, el acusado mantendría una relación con ella que incluye contactos sexuales y habría contribuido a que la adolescente se fugara en varias oportunidades”. Además, en la denuncia consta que Cipré le facilitó un teléfono a la joven para mantener contacto fluido con ella y otras adolescentes del internado.

En tanto, con respecto a la menor de 13 años –que vive en la localidad de Lanteri–, el imputado “la habría buscado en diversas ocasiones en auto o en moto y la lleva a su casa en Avellaneda, también aprovechándose de la situación de vulnerabilidad”. Según indicó el fiscal, “en una comunicación emitida el 23 de diciembre del año pasado, la Subsecretaría de la Niñez, Adolescencia y Familia de la provincia informó a la delegada de la Agencia de Investigación sobre Trata de Personas que ‘profesionales de la localidad de Lanteri han manifestado que el acusado frecuenta el pueblo trasladando adolescentes al Puerto de Reconquista para prostituirse’”, por lo que habría más víctimas.

Martínez señaló que los delitos que se le achacan son “corrupción de menores de 18 años; abuso sexual con acceso carnal por los menos con respecto a una de las víctimas; y abuso sexual simple respecto de la otra”. A éstos se agregaría la “tenencia ilegal de arma de fuego”, ya que el detenido no pudo justificar la propiedad de las dos armas secuestradas.

En ambos casos, el del cura y el del director, se siguieron las recomendaciones de la Guía de Buenas Prácticas confeccionadas por la Subsecretaría de Persecución Penal de la Fiscalía Regional 4”, señaló Leandro Mai, a cargo de esa Subsecretaría. “Este documento pone especial acento en velar por el interés superior del menor víctima, intentando minimizar los efectos de la victimización que el proceso penal supone para un menor de edad”, concluyó.

Total
0
Shares
Artículos relacionados
Total
0
Share