La Iglesia ortodoxa de Bulgaria condenó el concierto que Madonna dará en la capital, Sofía. Según la máxima autoridad religiosa de la región Plovdiv, el metropolita Nikolai, en el diario "24 Tshassa" lo que hace la cantante gringa no es más que una "difamación de los valores cristianos".
Para el religioso, la diva del pop es además "una de las figuras más escandalosas del mundo actual del espectáculo" e instó a los búlgaros a no acudir al concierto, ya que "Madonna y también todos nosotros" estaremos en el Juicio Final.
El día de la actuación de Madonna en Bulgaria, el 29 de agosto, coincide con la conmemoración de la decapitación de San Juan Bautista (cuya cabeza fue entregada en una bandeja a Salomé), una importante fecha para la Iglesia ortodoxa. Y si de coincidencias se trata, también coincide con la muerte hace dos meses de Michael Jackson. Con ese motivo, se dice, Madonna aprovechará de sorprender al público, dijo el organizador del concierto que se enmarca dentro de la gira mundial "Sticky and Sweet Tour.
El agente de Madonna botó a la basura el chándal decorado con motivos folclóricos que la primera dama de Estonia, Evelin Ilves, le regaló el pasado 4 de agosto, cuando canturreó en Tallin.
Según el portal Elu24, que cita al organizador del evento, Peeter Rebane, Madonna se negó a entrevistarse con la esposa del presidente estonio, Toomas Hendrick Ilves, por lo que le entregó el regalo al agente de la estrella. El asesor de la diva miró la prenda con un aire de desprecio y la tiró a la basura sin que la cantante la conociera, comentando que a estrellas de tal calibre no se le regalan semejantes tonterías.
