Dos de las principales organizaciones internacionales contra la pedofilia aseguraron esta semana que en Argentina “no existe tolerancia cero” al abuso eclesiástico por parte de la Iglesia, y que el papa Francisco “no ha estado al lado de las víctimas”.
Ending Clergy Abuse (Fin al Abuso del Clero) y BishopAccountability.org (Rendición de Cuentas para los Obispos), junto a sobrevivientes de abuso en Argentina, reclamaron en Buenos Aires que el Papa “anule” el secreto confesional y el concordato (que las jerarquías utilizan para no dar información) ante este delito, y acusaron directamente por encubrimiento al cardenal Mario Poli y los obispos Juan Alberto Puiggari, Mario Antonio Cargnello y Marcelo Colombo, entre otros religiosos.
“El papa Francisco no ha estado al lado de las víctimas de abuso sexual de la Iglesia Católica, y de hecho no existe hoy “tolerancia 0′ en Argentina”, sostuvo Peter Isely, fundador de ECA, durante la conferencia que las ONG internacionales brindaron frente al Hogar Sacerdotal Mariano Espinosa, a 30 metros de la vicaría de Flores, en la que también pidieron al Sumo Pontífice que “visite Argentina”.
Sosteniendo un cartel que decía “tolerancia 0” y acompañados por referentes locales como Julieta Añazco, Sebastián Cuattromo (ambos víctimas de abuso por parte de curas y religiosos), Isely describió que “cuando decimos tolerancia cero exigimos que todos los religiosos abusadores sean separados de sus cargos dentro de la Iglesia y puestos a disposición de la Justicia, pero también las jerarquías que los encubrieron”.
Bajo esta idea, Anne Barret Doyle, de BishopAccountability.org, que investiga casos de todo el mundo, enumeró un listado de obispos argentinos que “el papa Francisco debería investigar por su complicidad o falta de acción en casos que fueron denunciados”.
“El cardenal Mario Poli no ha develado ninguno de los secretos de abuso de su diócesis y nosotros sabemos que hay y hubo muchos; Puiggari, de Paraná, durante años mantuvo ocultos los abusos de Ilarraz (condenado a 25 años de prisión); tampoco da información a la Justicia Cargnello, de Salta, de los curas Lamas y Aguilera”, denunció. Además, se exigió al Papa que investigue el accionar de monseñor Marcelo Cuenca, de Río Negro.
Más denuncias
También cuestionaron la actitud del obispo de La Plata Víctor Manuel Fernández, frente a la denuncia contra el sacerdote Eduardo Lorenzo, y al monseñor Luis Urbanc, de Catamarca, en el caso del cura Gutiérrez. “Finalmente, el monseñor Marcelo Colombo no ha colaborado en el grotesco caso del Próvolo, en Mendoza, y además pidió que el juicio canónico se realice en otra diócesis ”, enfatizó. En Argentina al menos 66 curas fueron denunciados por abuso desde que en 2002 estalló el caso de Julio César Grassi, y solo cuatro de ellos fueron sancionados por la Iglesia.