Un obispo alemán defendió públicamente su apoyo a un libro de bendiciones y ritos para las uniones homosexuales, sumándose a otros prelados alemanes que empujan un cambio en la enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad.
El Obispo de Mainz (Alemania), Mons. Peter Kohlgraf, también sugirió que no se puede esperar que todos los católicos con inclinaciones homosexuales vivan castamente y que la Iglesia debería adoptar un enfoque pastoral que reconozca esto.
«Un buen número de personas que tienen atracciones homosexuales pertenecen a la Iglesia y son verdaderamente piadosas en el mejor sentido de la palabra», escribió Mons. Peter Kohlgraf en su columna titulada “No ignorar la ciencia”, publicada el 3 de febrero en el periódico diocesano y también en el sitio web de la diócesis.
“En cuanto a la demanda de castidad: ¿qué significa desde la perspectiva de las personas que experimentan atracción por el mismo sexo? Creo que pocos de ellos considerarían esta exigencia como discreta y respetuosa, porque -como también conoce el Catecismo-, esta inclinación no es auto-seleccionada”.
El libro de bendiciones, titulado “Paare. Riten. Kirche «. (Parejas. Ritos. Iglesia), es una publicación de Bonifatiusverlag, una editorial afiliada a la Arquidiócesis de Paderborn. El libro también contiene un prólogo de Mons. Ludger Schepers, Obispo Auxiliar de Essen.
Mons. Kohlgraf confirmó el 3 de febrero que miembros de su personal diocesano participaron en la producción del libro y expresaron su apoyo a la publicación. También dijo que pronto se «hizo consciente» de que ya existían muchas formas de bendiciones para las parejas homosexuales «y seguirían existiendo» después de que fuera nombrado Obispo de Mainz en 2017.
Mons. Kohlgraf es el último de una serie de prelados alemanes que piden públicamente cambios en la postura de la Iglesia sobre la homosexualidad. También ha habido llamamientos similares en la vecina Austria. En mayo de 2020 se publicó un libro sobre cómo las parejas homosexuales podrían recibir una bendición litúrgica formal de su unión en la Iglesia Católica, y un autor lo llamó una respuesta a una solicitud del comité litúrgico de la Conferencia de Obispos Austriacos.
Los obispos alemanes que hasta ahora han expresado públicamente su apoyo a la bendición de las uniones entre personas del mismo sexo incluyen al Arzobispo de Munich Freising, Cardenal Reinhard Marx; al Obispo de Osnabrück, Mons. Franz-Josef Bode; y al Obispo de Dresden-Meißen, Mons. Heinrich Timmerervers.
Mons. Georg Bätzing, presidente de la Conferencia de Obispos Alemanes, pidió en diciembre de 2020 cambios en la sección sobre homosexualidad del Catecismo de la Iglesia Católica, promulgado por San Juan Pablo II en 1992 como una guía autorizada de las enseñanzas de la Iglesia.
Según CNA Deutsch –agencia en alemán del Grupo ACI–, Mons. Bätzing dijo que creía que era necesario un cambio en el Catecismo, expresando apertura a las bendiciones de las uniones homosexuales. El Prelado dijo que «necesitamos soluciones para esto».
El Catecismo dice: “Apoyándose en la Sagrada Escritura que los presenta como depravaciones graves, la Tradición ha declarado siempre que ‘los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados’. Son contrarios a la ley natural. Cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso».
Luego añade: «Un número apreciable de hombres y mujeres presentan tendencias homosexuales profundamente arraigadas. Esta inclinación, objetivamente desordenada, constituye para la mayoría de ellos una auténtica prueba. Deben ser acogidos con respeto, compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de discriminación injusta. Estas personas están llamadas a realizar la voluntad de Dios en su vida, y, si son cristianas, a unir al sacrificio de la cruz del Señor las dificultades que pueden encontrar a causa de su condición».
«Las personas homosexuales están llamadas a la castidad. Mediante virtudes de dominio de sí mismo que eduquen la libertad interior, y a veces mediante el apoyo de una amistad desinteresada, de la oración y la gracia sacramental, pueden y deben acercarse gradual y resueltamente a la perfección cristiana», señala el Catecismo.
CNA Deutsch informó que Mons. Bätzing ha sugerido varias veces que la próxima Asamblea del Sínodo de los Obispos sobre el tema de la sinodalidad podría ayudar a implementar los cambios propuestos por los obispos alemanes y el “Camino sinodal” del país, no solo en Alemania, sino en toda la Iglesia Católica.
El “Camino sinodal” es un proceso que reúne a laicos y obispos alemanes para discutir cuatro temas principales: la forma en que se ejerce el poder en la Iglesia, la moral sexual, el sacerdocio y el papel de la mujer.
Aquellos que exigen un cambio en la enseñanza y la práctica de la Iglesia argumentan que es necesario a la luz de la “nueva evidencia científica” sobre la sexualidad humana. El camino sinodal se basa en el estudio “MHG” sobre abuso sexual. CNA Deutsch ha informado sobre las críticas que expertos católicos han hecho al estudio.
En diciembre de 2019, un grupo selecto de médicos especialistas, teólogos y canonistas fueron invitados a un evento en Berlín, organizado por el Arzobispo de Berlín, Mons. Heiner Koch. Entre los asistentes se encontraban el Obispo de Osnabrück, Mons. Franz-Josef Bode; el Obispo de Görlitz, Mons. Wolfgang Ipolt; Mons. Kohlgraf y varios obispos auxiliares de la Comisión de Fe y Familia del Episcopado.
Después de la reunión, el Episcopado anunció que estaba comprometido con una “nueva evaluación” de la enseñanza de la Iglesia sobre la homosexualidad, la moral sexual en general y los sacramentos de la ordenación y el matrimonio.
Todos los participantes, según Mons. Koch, coincidieron en que, dado que la orientación sexual debía considerarse inmutable, “cualquier forma de discriminación de las personas con orientación homosexual” debía ser rechazada, como “enfatizó explícitamente el Papa Francisco” en su exhortación apostólica de 2016 Amoris laetitia.
Al pedir una “discusión sólida apoyada por las ciencias humanas y la teología”, los obispos Koch y Bode también dijeron que Amoris laetitia ya proporcionaba “desarrollos” notables tanto de la doctrina como de la práctica de la Iglesia en esta área.
Mons. Kohlgraf escribió el 3 de febrero que la reunión de 2019 todavía le resonaba. Sugirió que desde que Dios ha claramente permitido la homosexualidad en el orden creado, uno debería tal vez también aceptar que esto sea expresado.
“Me cuesta mucho la idea de un error en el orden de creación”, escribió. «¿O esto muestra una variación en la diversidad de la creación que está ahí?», cuestionó.
El Comité Central de Católicos Alemanes (ZdK), una poderosa organización laica que dirige el Camino sinodal junto con la Conferencia de Obispos Alemanes, publicó una declaración en 2015 en la que pedía nuevas «formas litúrgicas, en particular las bendiciones de las parejas homosexuales» y la «aceptación incondicional» de las uniones homosexuales.
Thomas Sternberg, copresidente del Camino sinodal y de ZdK, reiteró su llamado a las bendiciones de las relaciones homosexuales en una entrevista con la Neue Osnabrücker Zeitung en septiembre de 2018.
En respuesta a los llamados al cambio en Alemania, el P. Matthew Schneider, dijo a CNA por correo electrónico el 17 de febrero que «la Iglesia históricamente se ha preocupado por una franja más amplia de pecado sexual que solo la homosexualidad».
Dijo que “dos enseñanzas llevan a la consecuencia lógica de que ningún acto sexual entre dos personas del mismo sexo es moral. Primero, el matrimonio es de un solo hombre y una mujer. En segundo lugar, todo sexo fuera del matrimonio es pecaminoso».
El P. Schneider, que está escribiendo una tesis doctoral sobre Teología Moral y ha respondido previamente a las demandas de los obispos alemanes, agregó: “Ciertas cosas en la enseñanza de la Iglesia son sólidas e inmutables, mientras que otras prácticas son prudentes, pero no deben ir en contra de los principios de la enseñanza infalible. «
Escribiendo para el National Catholic Register en 2019, el sacerdote revisó la historia de la enseñanza de la Iglesia sobre la inmoralidad de los actos homosexuales. Concluyó que durante «2000 años la Iglesia no ha vacilado en su enseñanza sobre la inmoralidad de los actos homosexuales».
“No ha habido una definición en el magisterio extraordinario, pero el magisterio universal ordinario puede ser infalible si se enseña universalmente con respecto al tiempo y al lugar. La inmoralidad de los actos homosexuales es una enseñanza infalible de la Iglesia en el magisterio universal ordinario. Por lo tanto, la Iglesia no puede cambiar esta enseñanza por mucho que ciertos sacerdotes deseen que cambie», señaló.
El pasado 17 de febrero el P. Schneider dijo a CNA que del modo como se hace la pastoral con “aquellos que se sienten atraídos por el mismo sexo para ayudarlos a vivir la castidad y otros aspectos del crecimiento en santidad -ya sea siguiendo un modelo de valentía o amistad espiritual-, es prudente. Sin embargo, la aplicación prudencial no puede ir tan lejos como para respaldar los actos pecaminosos de las personas, como los actos sexuales fuera del matrimonio legítimo».
“Asimismo, la prudencia permite las bendiciones de las amistades pero no las demanda. Sin embargo, la bendición de las amistades debe ser una amistad que lleve a las personas hacia la santidad, no una bendición de las ‘amistades homosexuales’ como un sustituto amable del matrimonio, respaldando, al menos implícitamente, los actos sexuales inmorales de los ‘amigos'», precisó.
Traducido y adaptado por Eduardo Berdejo. Publicado originalmente en CNA.