Es la primera vez que Naciones Unidas hace eco de los abusos hacia los derechos humanos relacionados con la brujería. La resolución insta a los Estados a condenar la discriminación, el estigma, la exclusión social y el desplazamiento forzado generalizados que sufren los acusados de «brujería»
Los abusos relacionados con la brujería ocurren a escala mundial, con mayor prevalencia en India, Nigeria, Zimbabwe y Sudáfrica. Las causas que originan la persecución por brujería son complejas e incluyen pobreza estructural, desempleo, falta de acceso a la atención médica, sistemas de justicia ineficaces, explotación religiosa, así como la creencia cultural profundamente arraigada. Naciones Unidas insiste que se necesitan más recursos y voluntad política para abordar esta cuestión mal comprendida, y también solicitan que la Oficina del Alto Comisionado «prepare un estudio sobre las violaciones de los derechos humanos arraigadas en acusaciones de brujería», que debe basarse en expertos consultando a las partes interesadas pertinentes.
Puedes acceder al documento del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas aquí