Supuestos milicianos islamistas han atacado un pueblo en el noroeste de Nigeria durante la noche del sábado al domingo, donde han matado a diez cristianos con machetes y pistolas y han quemado sus casa, según han informado testigos presenciales.
El ataque ha sucedido en el pueblo de Chibok, en una zona remota del estado de Borno (norte), epicentro de la insurgencia de la secta islamista Boko Haram.
"Supuestamente Boko Haram llegó por la noche e incendió las casas de la gente antes de matar a sus víctimas", ha declarado un antiguo concejal del pueblo, Nuhu Clark, que logró escapar del ataque y que ha añadido que después del mismo contabilizó diez cuerpos. Un portavoz de la Policía ha confirmado que están al tanto de este incidente pero aún están tratando de confirmar las víctimas mortales.
Los milicianos islamistas han matado a cientos de personas desde que Boko Haram se alzara contra el Gobierno de Nigeria en el año 2009.
Sus objetivos principales suelen ser las fuerzas de seguridad, los funcionarios públicos y los cristianos, a los que la secta islamista considera infieles. La inseguridad creada por el conflicto entre Boko Haram y el Gobierno ha hecho que las bandas criminales, que nada tienen que ver con el grupo islámico, aprovechen para robar y matar.