Las calles de San Salvador se vistieron de colorido y fervor con la manifestación que la Iglesia Luterana Salvadoreña hizo con motivo de su 31 aniversario en el que reafirmó la lucha y apoyo al país en tiempos difíciles.
Medardo Gómez, obispo de la iglesia luterana, dijo que esta manifestación es una procesión de fe que realizan cada año para encomendarse a Dios. Los luteranos salieron del Parque Cuscatlán rumbo a la iglesia La Resurrección, en la 5 de Noviembre, al nororiente de San Salvador.
Y es que la iglesia luterana ha jugado un papel importante históricamente, y en los últimos años ante los problemas que enfrenta la sociedad salvadoreña, sobre todo, problemas sociales como la inseguridad y la violencia.
“Nosotros trabajamos por la paz, por la justicia, por la reconciliación y no lo hacemos con palabras, sino con acciones. Trabajamos en las comunidades, atendemos los problemas sociales y tratamos de ayudar a la problemática nacional, a los niños, mujeres, jóvenes y siempre estamos atentos a denunciar las injusticias”, manifestó el obispo.
Sin embargo, ejercer su papel como referente nacional que busca la paz en el país no ha sido fácil, ya que la iglesia luterana ha enfrentado obstáculos durante su largo trayecto en el país.
“Los obstáculos, sobre todo en los gobiernos anteriores de derecha, es que hubo persecución a las iglesias que construían a la paz”, señaló el obispo.
“Quisieron destruir nuestra iglesia y no pudieron, porque gracias a Dios nuestra iglesia es mundial, aquí en el país somos pequeños, pero en el mundo somos una iglesia bastante fuerte y ahora ya no hay persecución, eso es una distinción”, expresó.
La iglesia luterana es uno de los actores que más ha propuesto soluciones al Estado para conseguir la paz que tanto anhela el país. Una de las muchas propuestas es en el tema de inseguridad y violencia.
“Nosotros hemos dicho en predicación y en oración que el único camino para la paz es el diálogo, eso es lo que recomendamos, incluso, lo incluimos para solucionar la violencia que tenemos con las pandillas, va a ser necesario dialogar, es difícil, pero es necesario como se hizo en tiempos de la guerra, no hay otro camino”, sostuvo Gómez.
En El Salvador, hay alrededor de 52 iglesias luteranas con más de 100 misiones y numerosos pastores que comparten su prédica con los miembros que asisten a sus templos.
“Somos una iglesia que está creciendo, no construimos mega iglesias, no es nuestro propósito, porque construimos comunidades, así que nuestra idea es seguir construyendo comunidades de vida y salvación. Somos una iglesia que poco a poco tiene más votos y voz en la sociedad salvadoreña”, aseguró el obispo.
Además de celebrar sus 31 años de fundación en El Salvador, la Iglesia Luterana conmemoró los 500 años de la reforma protestante que inició en el Siglo XVI por Martín Lutero y dio origen a numerosas iglesias y organizaciones.
