Uno de los cambios del nuevo Gobierno que más ha sorprendido, aunque esperado por toda la polémica que ha rodeado a su predecesor, es el del elegido por Mariano Rajoy para ocuparse del Ministerio del Interior, Juan Ignacio Zoido.Sin duda alguna, el ex alcalde de Sevilla tiene una ingente tarea por delante, puesto que al departamento, en más de una ocasión, lo ha situado ‘a los pies de los caballos’ debido a actuaciones poco claras su predecesor, Jorge Fernández Díaz, dejando sus ya famosas condecoraciones a vírgenes y santos en mera anécdota, grave, según los sindicatos policiales, pero anécdota ante otras acciones.Por este motivo, una de las organizaciones sindicales que operan en el Cuerpo Nacional de Policía y de reciente creación, la Agrupación Reformista de Policías (ARP) da la ‘bienvenida’ al nuevo ministro.
Cambio “obligado y necesario”
Dejan claro sus portavoces que el cambio de titular era “obligado y necesario”, al tiempo que llaman la atención acerca de lo prioritario que es “erradicar determinadas actuaciones y decisiones imputables a los anteriores máximos responsables del Ministerio y de la Dirección General de la Policía”, es decir,Fernández Díaz e Ignacio Cosidó, unidos por sus preferencias ultra religiosas. Dicen desde la ARP que ambos ya fueron “claramente reprobados en sede parlamentaria” y su gestión ha desembocado en un “serio desprestigio” para la propia institución policial y un claro “rechazo” por parte de la sociedad.Precisamente, la tendencia religiosa de los, hasta esta semana, responsables de Interior y su reflejo en la Policía, es uno de los asuntos que antes tiene que solucionar Zoido según este sindicato para “impedir que continúe la deriva castrense y religiosa en los actos oficiales”.
Organización policial
Independencia del poder político
Del mismo modo, instan a mayor dotación en políticas de lucha contra la violencia de género o una “verdadera” unidad policial judicial dependiente de Jueces y Fiscales.En definitiva, reclama el sindicato la necesidad de que la Policía Nacional se independice del poder político en diversas materias, por ejemplo en la de asuntos internos para liberarla de “la decisión discrecional” de sus responsables que, a su vez, “dependen del político de turno”, algo que de lo que ya si hizo eco ELPLURAL.COM hace unos meses.La labor que tiene por delante el nuevo ministro del Interior es necesaria, a tenor de lo que reclama este sindicato. Sin embargo, la figura de juez en excedencia Juan Ignacio Zoido tal vez no invite demasiado al optimismo, no en vano, siendo regidor de la capital hispalense, como su antecesor en el cargo, también dio muestras de su predilección religiosa, por ejemplo, cuando decidió quitar el nombre de una calle a Pilar Bardem para dedicársela a Nuestra Señora de las Mercedes, una petición defendida por la Hermandad de Santa Genoveva. Curiosamente, esta cofradía reconoció en su momento que llevaba ese nombre “en parte” en honor a la esposa de uno de los más sanguinarios golpistas a favor de Franco, el general Queipo de Llano.Con este panorama parece que las reivindicaciones de este y otros sindicatos policiales se quedarán en un segundo plano, sin que se vislumbre que, junto al cambio de nombre, vaya a producirse una transformación de las políticas impulsadas desde Interior.