Un estudio en la zona metropolitana del Observatorio Social de la Iglesia publicado por La Nación muestra notables inconsistencias en el nivel de incidencia de la pobreza que informa.
La iglesia miente. Mentía en 2009 cuando insistía en que la pobreza era similar a la del año 2001 en la crisis de salida de la convertibilidad, y sigue verseando hoy.
Dejemos de lado la discusión sobre valorización de canasta básica, que para el responsable del estudio es de $2.150 para un hogar tipo metropolitano. Hay inconsistencias notables en ese nivel de incidencia de la pobreza metropolitana que informa la consultora opositora. Veamos.
Según el Observatorio Social de la Iglesia, consultora opositora vinculada a la universidad privada UCA, existe hoy el mismo nivel de pobreza que en el año 2004, más precisamente la existente en el segundo semestre cuando la pobreza según el impoluto INDEC de entonces, ascendía a 37,7% en el GBA.
En ese momento concurrían tres factores que desbaratan el cálculo falaz del observatorio social. La desocupación que hoy es de 7,3% en el GBA ascendía entonces a 15,3% y el trabajo informal que hoy es del 34,5% en 2004 llegaba a 47,7%.
Finalmente, hoy existe la AUH que transfiere el equivalente a $ 440 por hogar beneficiario de alto impacto en el universo de ciudadanos bajo la línea de pobreza y en el año 2004, simplemente no existía.
O sea: tenemos la misma pobreza que en 2004 cuando se observaba el doble de desempleo un 50% más de trabajo informal y no existía la AUH. No estamos en el cielo, pero por el camino que nos marca la Iglesia con estos informes berretas, no llegremos jamás.