El proyecto convierte en obligatorio el cumplimiento del llamado testamento vital
Los diputados franceses aprobaron este martes con una amplia mayoría el proyecto de ley que autoriza la sedación “profunda y continua” de los enfermos terminales, considerada por algunos sectores como un paso hacia la legalización de la eutanasia.
La ley fue adoptada por 436 votos a favor, 34 en contra y 83 abstenciones, un amplio respaldo que muestra el consenso con el que el texto fue pactado entre los dos partidos mayoritarios de la cámara, el Partido Socialista (PS) y los conservadores de la UMP.
La nueva norma autoriza a los médicos a que seden a los pacientes en fase terminal que lo soliciten mientras se les retiran los tratamientos y aguardan la muerte.
Este ha sido uno de los puntos más polémicos del texto, puesto que los contrarios a la eutanasia consideran que la retirada de alimentación e hidratación provoca sufrimiento al paciente.
Otra de las novedades de la ley es que convierte en obligatorio el cumplimiento del llamado testamento vital, en el que todas las personas pueden dejar escrito lo que consideren que debe hacerse en caso de que entren en fase terminal y no estén en condiciones de comunicarlo en esa etapa.
Hasta ahora, ese testamento debía ser tenido en cuenta por los médicos, pero su cumplimiento no era obligatorio.
El proyecto de ley, que cuenta con un gran respaldo social, según recientes sondeos publicados, pasará ahora a ser debatido en el Senado, donde está previsto que se apruebe antes del verano.
La votación fue interrumpida brevemente cuando varias personas lanzaron sobre los diputados trozos de papel con la leyenda ‘no a la eutanasia’.
Algunos diputados de izquierda calificaron el proyecto de Ley de ‘frustrante’, ‘frío’ y ‘tímido’.