Comentarios del Observatorio
El sistema electoral y la composición del parlamento iraquíes son un claro ejemplo de sistema antidemocrático en el que determinadas confesiones religiosas tienen un cupo de escaños reservados para representantes de su comunidad étcnico-religiosa. Con esta decisión judicial, el país podría estar dando un paso hacia la igualdad y la laicidad, dejando de discriminar por motivos de conciencia.
Afecta a todas las minorías étnico-religiosas
Los partidos y organizaciones minoritarias que reclaman la representación política de las comunidades cristianas en Iraq continúan su movilización contra la decisión del Tribunal Federal Supremo iraquí de anular la cuota de escaños reservados a los diputados pertenecientes a las comunidades étnico-religiosas minoritarias en el Parlamento de la Región Autónoma del Kurdistán iraquí.
Una delegación de representantes y activistas políticos pertenecientes a las comunidades cristianas autóctonas (caldeos, sirios y asirios) ha sido recibida el martes 12 de marzo en Bagdad por el presidente iraquí Abdul Latif Rashid. Durante el encuentro, que ha tenido lugar en el Palacio Presidencial al Salam -informan fuentes oficiales de la Presidencia iraquí- el Jefe del Estado ha reconocido la importancia de las comunidades cristianas autóctonas como «parte integrante de la diversidad interdependiente de la identidad multicultural del país».
La delegación de políticos cristianos ha estado encabezada por Yaqoub Korkis Yaqu, Secretario General del Movimiento Democrático Asirio, y Romeo Hakkari, del Partido Democrático «Bet-Nahrain».
El pronunciamiento del Tribunal Supremo, núcleo de las quejas de las siglas políticas animadas por representantes cristianos, suprimió la cuota de 11 escaños parlamentarios reservados a las comunidades étnicas y religiosas minoritarias en el Parlamento de la Región Autónoma del Kurdistán iraquí, donde está previsto que se celebren elecciones parlamentarias el próximo 10 de junio. Según los políticos cristianos, esta disposición va en detrimento de los derechos políticos de las comunidades confesionales minoritarias garantizados por la Constitución.
El lunes 11 de marzo, dirigentes de otros partidos políticos representados por Jinan Jabbar, del Partido Nacional Caldeo, anunciaron su intención de boicotear las elecciones previstas en la Región Autónoma del Kurdistán en protesta por la controvertida disposición del Tribunal Supremo Federal. El sábado 9 de marzo, en una entrevista concedida al medio de comunicación kurdo Rudaw, el cardenal Louis Raphael Sako, patriarca de la Iglesia caldea, declaró también que la disposición de eliminar los escaños reservados a los grupos étnicos y religiosos minoritarios era «inconstitucional», y expresó su preocupación por las injerencias y presiones que pudieran afectar a los procesos de toma de decisiones del Tribunal Supremo.
