Las informadoras fueron arrestadas en septiembre de 2022 y ahora se enfrentan a cinco años de prisión tras desvelar el caso de la muerte de Amini, la joven que murió tras ser detenida por no llevar el velo islámico correctamente.
Las periodistas iraníes Nilufar Hamedi y Elahe Mohammadi, que desvelaron el caso de la muerte de Mahsa Amini bajo custodia policial en 2022, deberán cumplir la pena de cinco años de prisión dictada en su contra, anunció este domingo el poder judicial de Irán.
«Su caso ha sido enviado a las autoridades pertinentes para la ejecución del veredicto final», indicó el portavoz del poder judicial iraní, Asghar Jahangir, en una rueda de prensa, según informó la agencia Mizan.
Las dos periodistas han sido condenadas a cinco años de prisión por «colusión contra la seguridad nacional» y a otro año tras las rejas por «propaganda contra el sistema», por lo que deberán cumplir la pena máxima.
Hamedi, del diario reformista Shargh, y Mohammadi, del periódico Hammihan, también habían sido condenadas en primera instancia, en octubre de 2023, a siete y seis años de prisión, respectivamente, acusadas de «colaborar con el gobierno extranjero hostil», en referencia a Estados Unidos.
Sin embargo, el Tribunal de Apelaciones de la provincia de Teherán las absolvió en agosto pasado.
Las informadoras fueron arrestadas en septiembre de 2022 después de que Hamedi publicara una foto de Amini en el hospital, cuando se encontraba en coma y entubada, y de que Mohammadi cubriera el entierro de la joven en la ciudad de Saqez, en Kurdistán, donde comenzaron las protestas de «mujer, vida, libertad».
Casi un centenar de periodistas y fotógrafos fueron detenidos por realizar su trabajo durante las movilizaciones en Irán, de acuerdo con el Comité para la Protección de Periodistas, de los que 80 han sido puestos en libertad bajo fianza, tal como ocurrió con Hamedi y Mohammadi en enero pasado, tras 17 meses en arresto temporal.
La muerte de Amini provocó fuertes protestas que durante meses pidieron el fin de la República Islámica y solo desaparecieron tras una represión que causó 500 muertes, 22.000 detenciones y 10 ejecuciones.