Medios locales informan de que el individuo ha salido por su propia voluntad y que las granadas encontradas eran simuladas.
Las fuerzas de seguridad francesas han detenido a un hombre que ha entrado, con un supuesto dispositivo explosivo, en el consulado iraní en París. El suceso ha requerido de un cierre perimetral y la suspensión de dos líneas de metro.
El hombre ingresó en el consulado sobre las 11.00 horas.Algunos testigos indicaron que se quitó el abrigo y portaba un chaleco táctico artesanal en el que, aparentemente, había un cinturón explosivo o granadas.
Según recoge la cadena francesa BFMTV, el individuo ha salido por su propia voluntad del consulado. Las fuerzas de intervención lo han arrestado y registrado, pero las granadas eran simuladas. También han registrado el vehículo en el que llegó al lugar. La cadena de televisión ha agregado que agentes franceses solicitaron ingresar en el consulado, pero que los empleados del edificio diplomático lo prohibieron.
El diario Le Parisien señaló que el individuo tiró varias banderas al suelo y aseguró que su objetivo era vengar la muerte de su hermano. Por su parte, la Fiscalía de París indicó que el hombre amenazó con cometer un acto violento.
Las autoridades acordonaron la zona en torno al consulado, situado cerca de la plaza del Trocadero, lugar muy transitado frente a la Torre Eiffel. Además, enviaron un dispositivo policial, con unidades especiales de las BRI (Brigadas de Investigación e Intervención), bomberos y ambulancias.
El detenido, un hombre francés de 61 años nacido en Irán, había intentado incendiar el consulado iraní en septiembre pasado. Precisamente, el próximo lunes estaba previsto el juicio en apelación por ese caso.
Este incidente se produce en un contexto marcado por las tensiones entre Irán e Israel, que en los últimos días han intercambiado ataques sobre sus territorios, el más reciente esta misma madrugada cuando varios drones israelíes han sido lanzados sobre Isfahán, en el centro de Irán. También París está a menos de 100 días de celebrar los Juegos Olímpicos, por lo que la seguridad es máxima debido a las amenazas terroristas.
El consulado de Irán en París no tiene una elevada actividad a causa de la frialdad entre los dos países, que hace que se emitan pocos visados. A causa de su programa nuclear, París impuso duras sanciones a Teherán, a quien acusa de mantener a cuatro ciudadanos franceses detenidos por motivos políticos y que considera rehenes.
El embajador iraní en París fue convocado el pasado lunes por el Ministerio francés de Exteriores para transmitirle un mensaje de firme rechazo tras el ataque de Teherán sobre Israel con misiles y drones en la noche del sábado.
