PSOE, IU y UPyD faltan al acto anual en el que se «agradece» la protección contra el terremoto de 1884
COMENTARIO: Un ejemplo anual de confesionalismo de nuestras autoridades públicas vulnerando la neutralidad que debe mantener cualquier Estado que respete la libertad de conciencia de su ciudadanía. Además en este caso, un sinsentido, que une el mantenimiento de una superstición y la asignación de una malvada discriminación por parte de la Virgen que libra a unos y permite la muerte de 800 personas a pocos kilómetros.
Granada celebró ayer, como cada 26 de diciembre, el tradicional ritual con el que renueva el voto de agradecimiento a la patrona, la Virgen de las Angustias, por haber sido liberada de las consecuencias de los terremotos que arrasaron varios pueblos de la provincia en 1884 y 1956. La celebración cuenta con el rechazo del grupo municipal de IU, cuya concejal Maite Molina se refirió recientemente a este asunto por su cuenta de Twitter para pedir «pruebas» sobre la supuesta protección mariana ante los seismos.
Al hilo de esta celebración, el portavoz del grupo municipal de IU, Francisco Puentedura, que considera «absurdo» mantener estas tradiciones, ha reclamado al equipo de gobierno, del PP, que asuma su responsabilidad elaborando un plan de emergencia ante un eventual terremoto en lugar de «encomendarse a vírgenes y santos».
Una acusación a la que respondió ayer el concejal de Economía y alcalde en funciones, Francisco Ledesma, quien dijo a IU «que deje trabajar a los profesionales» ya que tanto Bomberos como Policía Local llevan un año y medio trabajando precisamente en la protección de la ciudad ante un posible terremoto de fuerte intensidad. «El señor Puentedura lo que critica es la tradición. Si por él fuera quitaría hasta la Navidad, pero nosotros no vamos a perder esta tradición con la Virgen de las Angustias», dijo Ledesma.
Tampoco participaron en el acto el grupo municipal del PSOE, cuyo portavoz, Francisco Cuenca, dice que ellos están para «cosas más importantes»; ni la concejal de UPyD, Mayte Olalla, quien opta por «separar lo político de lo religioso».
Como marca la tradición, miembros de la corporación municipal bajo mazas desfilaron al mediodía desde la plaza del Carmen, donde se ubica el Ayuntamiento, hasta la Basílica de las Angustias, donde se ofició una misa para renovar el voto a la Virgen. La corporación municipal estuvo custodiada por cuatro maceros vestidos con ropas de terciopelo y damasco carmesí del siglo XIX y mazas de plata, y por cuatro policías locales vestidos de gala.
El terremoto registrado en 1884, con epicentro en las cercanías del municipio de Alhama, tuvo lugar el 25 de diciembre de ese año, dejó un rastro de 800 muertos y 1.500 heridos y arrasó municipios como Güevéjar y Santa Cruz del Comercio.
El Ayuntamiento de Granada (PP) preside la misa a la Virgen de las Angustias y hace los votos de la ciudad por librarla de los terremotos.