Según ha señalado el hermano mayor de la cofradía, José Antonio Alemán, la Audiencia de Granada ya estudia a quién elegir, y esperan que este año no ocurra lo que pasó el anterior
COMENTARIO: Desde el Observatorio de la Laicidad venimos denunciando este privilegio anacrónico que rompe los principios constitucionales de una igualdad jurídica para todos y permite que una codradía, entidad de carácter religioso, pueda liberar un preso. Sin embargo el Gobierno sigue aceptando esa situación, incluso después del escándalo del año pasado, en el que el preso a liberar delinque nuevamente días antes de su liberación.
La Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad y Descendimiento del Señor de Granada ha vuelto a pedir el indulto de un reo para el Viernes Santo de esta Semana Santa, confiando en que este año no vuelva a ocurrir lo que el pasado, en que el preso elegido, que disfrutaba de un tercer grado, fue detenido por tráfico de drogas dos días antes de que se le otorgara el privilegio y recientemente condenado a cuatro años y medio de cárcel por un delito contra la salud pública.
Según ha señalado el hermano mayor de la cofradía, José Antonio Alemán, la Audiencia de Granada ya estudia a quién elegir, de entre una terna de candidatos, para que reciba el indulto que deberá ser autorizado por el Consejo de Ministros. "Ya dice el dicho que todo es posible en Granada, pero esperamos que este año el indulto no nos salga mal", ha señalado Alemán, que ha reconocido que en la hermandad todos se toman "con muchas reservas" el indulto.
La Soledad, que este 2011 cumple 450 años, decidió recuperar el pasado año un privilegio que no otorgaba desde 1928, año en el que le fue conmutada la pena capital a un preso que había sido acusado de homicidio que logró reducir su castigo a cadena perpetua gracias a la merced otorgada por Alfonso III. Sin embargo, no pudo consumar su intención, porque el elegido delinquió a pocos días de obtener su libertad.
El indulto fue concedido por primera vez por la Reina Victoria Eugenia de Battenberg, Hermana Mayor Honoraria de la Hermandad y esposa del Rey Alfonso XIII, a quien se le solicitó con motivo de su onomástica en 1927.
Así, el 2 de abril de 1928 la Dirección General de Justicia, Culto y Asuntos Generales, y por acuerdo del Consejo de Ministros, propuso a Alfonso XIII la conmutación de la pena de muerte por la inmediata de cadena perpetua a un reo de Alhendín (Granada) en el acto de la Adoración de la Santa Cruz del Viernes Santo de ese año, tal y como luego se hizo.
La liberación de este Santo se producirá al paso de la comitiva por la calle Cárcel Baja con Placeta de Villamena. Allí se hará entrega del recluso a indultar, el cual se dirigirá a la Catedral Granadina, donde, según el protocolo del Arzobispado de Granada, se firmará el acta de liberación y éste saldrá simbólicamente por la Puerta del Perdón, incorporándose al cortejo penitencial de forma anónima.