Los padres abogan por una escuela «sin dogmas» ante la petición de comida «halal» de la comunidad islámica de Alzira
La Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) de Valencia cree que el menú ‘sin cerdo’ que hasta ahora se ha servido a los alumnos musulmanes del CAES Teodoro Andreu de Alzira «respeta los derechos» de los niños que profesan esta religión, recogidos en la Constitución.
En ese sentido, su presidenta, Eva Grimaltos, defiende la actuación del colegio y rechaza que deba proporcionarse comida ‘halal’ —que no contenga carne porcina y que el resto esté sacrificada mirando a la Meca y en el nombre de Alá— a los estudiantes de creencias islámicas, tal y como reclaman unas 40 familias de este centro educativo ribereño.
«Abogamos por una escuela laica y sin dogmas. El menú ‘sin cerdo’ ya les garantiza sus derechos constitucionales de respeto a la diversidad. Lo que no podemos permitir es que el culto se lleve dentro de la escuela», sostiene la presidenta de la federación de padres. Eva Grimaltos hace un paralelismo con los ritos católicos y apunta que «en Cuaresma no se quita la carne de las escuelas porque haya creyentes que lo pidan».
Aconfesionalidad del Estado
Asimismo, recuerda que la Carta Magna consagra la aconfesionalidad del Estado. «Ellos viven en el Estado español y deben saber que aquí no hay religión oficial», ha dicho en alusión a las familias que desde hace cerca de dos semanas no dejan a sus hijos en el comedor escolar a modo de protesta porque no se les sirve menú halal, un pulso que piensan mantener hasta que su petición sea atendida a pesar de que la Conselleria de Educación ya ha descartado modificar la normativa porque aduce que los colegios valencianos ya sirven menús adaptados para niños con diferentes patologías, creencias y también vegetarianos.