La Audiencia Provincial de Huesca estima los argumentos de la Diócesis y anula la sentencia de 2021 por la que se otorgó al Consistorio la titularidad
La Audiencia Provincial de Huesca ha revocado la sentencia del Juzgado de lo Civil número 4 de la capital oscense que otorgaba la propiedad de la ermita de Nuestra Señora de la Virgen del Castillo al Ayuntamiento de Alberuela de Tubo y la ha dejado sin efecto tras estimar el recurso de apelación interpuesto por el Obispado.
En el escrito de la sentencia, al que ha tenido acceso este periódico, el tribunal reconoce en su argumentación la inmatriculación del inmueble en favor del Obispado de Huesca el 25 de mayo de 2015, “la cual fue comunicada al Ayuntamiento que interpuso al demanda que la cuestiona el 27 de diciembre de 2019”.
Según la Audiencia Provincial, “el Obispado disponía de título de adquisición del dominio sobre la ermita sin necesidad de acreditar los requisitos legales de la usucapión ordinaria o extraordinaria, pues le basta acreditar su título de adquisición con la inscripción no impugnada”.
Asimismo el tribunal “entiende acreditado que la ermita ha estado destinada al culto católico desde su construcción y ha sido, desde su inicio, titularidad originaria de la Iglesia Católica, a través del Obispado de Huesca”. Un hecho que, detalla la Audiencia Provincial, “se desprende no solo de la propia definición de la edificación sino del propio catastro al indicar que el destino de la edificación es religiosa, se hace misa una vez al año, con ocasión de la romería y para celebrar alguna boda o bautizo”. A su vez la Audiencia Provincial de Huesca tilda de “insuficientes” las pruebas practicadas por el Consistorio para basar una declaración sobre propiedad.
El abogado del Obispado de Huesca, Joaquín Guerrero, ha señalado en declaraciones a este periódico que la propiedad de la ermita “queda aclarada definitivamente” y subraya que las obras realizadas por “el Ayuntamiento” no suponen que este asuma la titularidad del inmueble.
Asimismo ha sostenido que la ermita figuraba en los archivos de la Iglesia desde el siglo XIX, la tenía matriculada y ya había realizado actos religiosos. Y añade que “estos pleitos suelen tener un cierto componente ideológico y una cuestión es defender lo que se considera que es propiedad y otra seguir manteniendo un conflicto vecinal que nunca debe ser bueno”.
El alcalde de Alberuela de Tubo, José Manuel Penella, ha indicado que el consistorio estudiará con abogados y vecinos si presentan recurso al TSJA, a la vez que ha tildado la sentencia de “injusta y desoladora” al ser “muy tendenciosa en favor del Obispado” con boletines informativos de la propia diócesis. Y recuerda que la Iglesia “tenía la ermita abandonada en escombros y el Consistorio la ha levantado con subvenciones públicas”.