La Dieta, la cámara baja del parlamento polaco, rechazó el jueves por la noche un proyecto de ley elaborado por el bloque de católicos ultraconservadores que establecía una pena de prisión para el que recurriera a la fecundación in vitro (FIV).
Estudiado en primera lectura, el proyecto de ley fue rechazado por 244 diputados contra 162 que votaron a favor y 10 que se abstuvieron.
Por iniciativa del grupo de ciudadanos Contra in vitro, el proyecto recolectó más de 160.000 firmas. Proponía que "toda persona cuya acción conduzca a la fecundación in vitro" pueda ser condenada hasta un máximo de tres años de prisión.
Varios proyectos de ley sobre la FIV, que hasta ahora no está regulado por una ley en Polonia, ya están a la espera en el Parlamento. Dos fueron presentados por el partido liberal, Plataforma Cívica (PO, en el poder), uno lo hizo la izquierda socialdemócrata (SLD, oposición) y uno el partido conservador, Derecho y Justicia (PiS, oposición).
El tema divide a la clase política, mientras que la poderosa Iglesia católica polaca alimenta el debate, condenando la fecundación in vitro. Los obispos polacos calificaron la FIV de "especie de aborto refinado", ya que este método "hace perecer numerosos embriones" en cada intento. Un arzobispo, monseñor Henryk Hoser, calificó a los partidarios del FIV de "esquizofrénicos morales".
Tras la caída del comunismo en 1989, la Iglesia católica obtuvo la prohibición del aborto, penado en Polonia con dos años de prisión para todos aquellos que lo practican, con al excepción de la mujer embarazada y salvo en casos de violación, incesto o malformación irreversible del embrión.
