El Ejecutivo autonómico va a destinar 4,5 millones de euros para llevar a cabo esta medida durante su primer año, cifra que duplicará al segundo año. El consejero de Educación, Rafael van Grieken, ha asegurado que beneficiará a unos 1.500 estudiantes que tenían que “renunciar” a la educación concertada.
Las bases regulatorias para la concesión de las ayudas denominadas ‘cheque bachillerato’ ya están publicadas en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) y se establece los niveles de renta como principal criterio de reparto, de cara a que los alumnos con dificultades económicas puedan estudiar en los centros que deseen.
Para llevar a cabo esta medida, comprometida por el presidente de la Comunidad, Ángel Garrido, el Ejecutivo autonómico va a destinar 4,5 millones de euros este primer año de aplicación, para alumnos de 1º de Bachillerato, con la previsión de beneficiar con esta ayuda a 1.500 estudiantes. La intención es duplicar esta cifra en el segundo año de aplicación, donde ya estará implantada en toda la etapa postobligatoria, exponen fuentes de la Consejería de Educación.
Proceso de selección
Entre los requisitos que deben cumplir los solicitantes están que el alumno debe estar matriculado o tener reserva de plaza para el curso que viene en primer curso de Bachillerato en uno de los centros privados de la Comunidad de Madrid. Además, los solicitantes no deben haber repetido primer curso de Bachillerato y no superar la renta per cápita de 10.000 euros para primar la concesión a familias con menos ingresos.
De esta manera, una familia compuesta por dos adultos y dos hijos que supere los 40.000 euros de renta anual no podrá acceder a la ayuda. Las solicitudes serán baremadas conforme a los ingresos familiares, de tal manera que la renta per cápita hasta 5.000 euros obtendrá 4 puntos; hasta 7.500 euros con 2,5 puntos; y hasta 10.000 euros, con 1 punto.
Asimismo, la convocatoria también prima con un punto que el alumno solicitante esté cursando estudios en el mismo centro en el que pretende comenzar primero de Bachillerato. Las becas se concederán en función de la puntuación, y en caso de empate se tendrá en cuenta la renta per cápita. En último caso, se resolverá mediante un sorteo.
El consejero de Educación, Rafael van Grieken, ha asegurado a los medios de comunicación que esta medida beneficia a muchas familias con menos recursos que con la llegada de sus hijos a la etapa de Bachillerato, tenían que “renunciar” a un centro concertado.
Con esta nueva línea de ayudas, se les ofrece la posibilidad a los alumnos a poder proseguir sus estudios en estos centros. “Esto es dar oportunidad y son las bases regulatorias que se harán en breve y permitirá a las familias poder seguir con la educación que han elegido para sus hijos”, ha justificado el consejero.