La cofradía insiste en que tienen informes técnicos y jurídicos que afirman que la restauración del manto de 1956 con simbología de la dictadura franquista está en el marco de la Ley de Memoria Histórica.
La Primitiva, Fervorosa e Ilustre Cofradía de Caballeros, Damas y Corte de Infantes de Santa María de África Coronada , la Cofradía de Nuestra Señora de África, ha anunciado este martes el lanzamiento de una campaña para recabar donativos entre los ceutíes para reunir los alrededor de 50.000 euros necesarios para restaurar el manto de la Patrona, el único que tiene , con el que procesión cada 5 de agosto, y tras el que cada año se levanta la polvareda de la polémica por el escudo franquista que cubre a la Patrona de todos los ceutíes.
Desde la Cofradía insisten en que el proyecto de restauración del manto con la simbología franquista tiene el aval de un“informe técnico y jurídico”. “Todo esto está contemplado en la Ley de memoria Histórica”, zanja la hermana mayor de la cofradía, Maria del Carmen Pasamar, “nosotros antes de dar este paso (con el visto bueno del Cabildo General de Hermanos) por supuesto estamos informados no vamos a hacer nada que no podamos, antes de hacer esto llevamos meses trabajando en ello, tofo está super estudiado, la Ley nos acoge para todos”. Dudas, tanto técnicas como artísticos e históricas, que resolverá y explicará detalladamente, prometen, el arquitecto y experto Francisco Pérez Buades en una conferencia este próximo sábado 10 de abril a las 12.00 horas en los salones del Hotel Puerta de África
Un manto, donado por los Gobernadores y alcaldes de toda España en 1956, que “está muy deteriorado”, remarcan. Para poder volver a procesional con él necesitan el apoyo de los fieles ceutíes. “Hemos pensado que este manto, con el que queremos ver procesional a la Virgen no lo queremos ver más así y queremos hacer partícipe al pueblo de Ceuta, queremos que sea patrimonio del pueblo de Ceuta y que todo el mundo pueda colaborar mediante una suscripción popular”, explica. Cada donativo, de un mínimo de 50 euros, dará derecho a que el nombre del donante quede inscrito en el forro del manto de la Patrona. “Esa aportación –añade Pasamar– que se hace como donación, puede desgravarse fiscalmente”. Por supuesto remarcan, si los donativos superan el coste de la restauración, ese remanente se donará una causa caritativa.
Solo si hay razones artísticas puede mantenerse la simbología franquista, pero solo «concurrirán razones artísticas cuando se trate de elementos con singular valor artístico que formen parte de un bien integrante del patrimonio histórico español.
El proyecto de reforma de la Ley de Memoria Histórica que prepara el Gobierno recoge expresamente la eliminación de nombres de centros públicos y localidades y matiza que si los elementos contra la memoria están en ubicados en edificios de carácter privado o religioso, pero con proyección a un espacio o uso público, los propietarios deberán retirarlos o eliminarlos. Solo si hay razones artísticas puede mantenerse la simbología franquista, pero solo «concurrirán razones artísticas cuando se trate de elementos con singular valor artístico que formen parte de un bien integrante del patrimonio histórico español. En el caso de que concurran razones artísticas o arquitectónicas que obligan al mantenimiento de los referidos elementos, habrá de incorporarse una mención orientada a la reinterpretación de dicho elemento conforme a la memoria democrática, regula el anteproyecto.
«Nefasto estado de conservación»
Este manto de salida,”el manto blanco de nuestra Virgen” no se restaura por gusto o por un capricho nuestro, es una necesidad, el manto está en un estado de conservación nefasto, es el momento de actuar, explica Juan Luis Bernal, mayordomo de la hermandad, que defiende el “valor histórico” de la pieza, confeccionada hace tan solo 65 años. César Gómez, profesional de bordado en oro —autor de la restauración del palio de la Caridad, de las bambalinas de la Virgen de la Palma o la bacalá del Rocío— será el responsable de acometer la restauración. Un trabajo “básico” resume, ya que el bordado no presenta problema alguno, ya que es relativamente moderno, de 1956, pero no así su soporte, de un tisú de alta calidad con hilos de plata que no ha sido conservado adecuadamente, llegando a guardarse doblado, relata el restaurador.
El objetivo ahora, es, una vez se recaude el dinero suficiente, que la Patrona vuelva a procesional con su manto en 2022.
