La alcaldesa de Lugo, Lara Méndez, ha participado este jueves en la tradicional ofrenda a San Roque -que se celebra desde hace dos siglos y medio en la capilla lucense del mismo nombre- y le ha pedido al santo su «intercesión para ayudar a combatir la plaga de la avispa velutina».
El acto institucional tiene su origen hace exactamente 250 años, el 16 de agosto de 1768, cuando la corporación municipal de la época decidió establecer un voto por parte de la ciudad para agradecer al santo su intercesión a la hora de combatir «una terrible epidemia de peste», según cuenta la tradición.
La alcaldesa actual destacó el «peso de la cultura y la historia» en esta efeméride, que se celebra coincidiendo con «un día de fiesta en prácticamente toda Galicia».
La regidora lucense quiso actualizar asimismo la invocación al santo, pidiéndole «su intercesión» en la lucha contra la avispa asiática o velutina.
«A ese santo protector que según la tradición combatía la peste, que nos ayude ahora a combatir la plaga de la velutina», solicitó.
La alcaldesa también aprovechó para criticar la gestión del gobierno autonómico y, de un modo especial, de la Consellería del Medio Rural ante la crisis provocada por la invasión de este insecto.
«La Xunta nos dice que no tiene competencias y la única solución que nos da es convivir con ella», indicó Méndez.
Por este motivo, la regidora lucense le pidió a San Roque «que eche una mano a los lucenses y a todos los gallegos para que inspire a la Xunta de Galicia y le diga cuál es la senda a seguir».
