Mijas se volcó con el esperado traslado de la Virgen de la Peña. La alcaldesa perpetua se paseó preciosa por su pueblo, aclamada por sus devotos
El traslado marca el inicio de las fiestas en honor a la Virgen de la Peña y, como tal preámbulo, “es un día con una carga emocional grandísima. Es una procesión más íntima, más del pueblo, de alegría desbordante…”, expresaba José Ignacio Ruiz, miembro de la Hermandad de la Virgen de la Peña, minutos antes de salir la imagen de su santuario ante un clamor popular que abarrotaba el paseo del Compás, así como numerosos visitantes “asombrados” con tan preciosa estampa, como comentó Francisco Castillo, venido desde Toledo. Como es ya tradicional, la alcaldesa perpetua de Mijas se paseó por su pueblo a hombros de la Policía Local en una noche que resultó muy emotiva. De nuevo los mijeños volvieron a demostrar su “fe ciega” por su patrona, apuntó el alcalde, Juan Carlos Maldonado (C’s). Y es que el pueblo se volcó con este traslado que concluyó, como siempre, con una colorida y multitudinaria ofrenda floral en la parroquia en la que participaron colectivos de todo el municipio.
