Falla en contra de la Asociación para la Libertad de Conciencia de Múnich, organización que se presenta a sí misma como una «comunidad ideológica basada en los principios de la Ilustración y el humanismo»
La guerra contra la Cruz sigue siendo uno de los temas recurrentes de los laicistas. Gracias a Dios. Saben de su importancia, quizá en la misma medida en la que es menospreciada por un ambiente «cristiano» culturalmente.
Según informa The European Conservative, un tribunal alemán desestimó el martes 19 de diciembre una demanda contra el Kreuzerlaß (Decreto de la Cruz) que exige la exhibición de cruces cristianas en instituciones públicas en todo el estado predominantemente católico de Baviera.
El decreto , firmado en 2018 por el ministro presidente del Estado Libre de Baviera, Markus Söder (CSU), estipula:
En la entrada de cada edificio de servicios debe ser claramente visible una cruz como expresión de la identidad histórica y cultural de Baviera.
La sentencia del Tribunal Administrativo Federal de Leipzig se produce tras una demanda presentada por la Asociación para la Libertad de Conciencia de Múnich. La organización, que se presenta a sí misma como una «comunidad ideológica basada en los principios de la Ilustración y el humanismo», afirmó que el decreto infringía el derecho a la libertad religiosa.
La decisión del tribunal confirmó una sentencia de un tribunal administrativo estatal inferior que dictaminó que las cruces a) no violan el principio de neutralidad religiosa e ideológica ya que los estados no están obligados a renunciar por completo a las referencias religiosas, y b) no discriminan a nadie por sus motivos. su fe.
La colocación de las cruces «en las entradas de los edificios públicos no obstaculiza la apertura del Estado a otras religiones y visiones del mundo», explicaron los jueces del Tribunal Supremo en su fallo.
«Las cruces expuestas representan un símbolo central de la fe cristiana para el observador objetivo. Sin embargo, no violan la propia garantía de libertad de los demandantes, que está cubierta por el artículo 4 (1) y (2) de la Ley Fundamental», añadió el tribunal.
En declaraciones dadas a la Agencia de Prensa Alemana (DPA) en Munich, Söder elogió la decisión del tribunal, diciendo : «La cruz es un signo de nuestro carácter cristiano y cultural. Pertenece a Baviera».
Klaus Holetshek, líder del grupo parlamentario del partido en el parlamento estatal de Baviera, se hizo eco de los comentarios del jefe del CSU, quien dijo:
Baviera es un país de diversidad, tolerancia y, por supuesto, libertad de religión, pero Baviera también es un país moldeado por el cristianismo y es justo que el Estado Libre lo exprese con la cruz.
Deberíamos decir «sí a nuestros valores y sí a la naturaleza cristiano-occidental de nuestro país», añadió Holetshek .
El arzobispo de Bamberg, Baviera, Herwig Gössl, también expresó su aprobación a la sentencia del Tribunal Supremo.
«La cruz es un símbolo de nuestra cultura cristiana y representa la paz, la libertad y la reconciliación. Por eso me alegro cuando la señal de la cruz, en la naturaleza, en los salones o incluso en los edificios oficiales, señala los valores cristianos y nos recuerda la responsabilidad ante Dios», afirmó.
A pesar del fallo del tribunal de Leipzig, la presidenta de la Asociación para la Libertad de Conciencia, Assunta Tammelleo, sigue decidida a eliminar las cruces. Según ella, la organización tiene previsto llevar el caso ante el Tribunal Constitucional Federal de Karlsruhe. «Este no es el final», insistió Tammelleo.
