Continúa la polémica sobre la utilización de crucifijos en las investiduras
La utilización de un crucifijo y una Biblia en la investidura de los gobiernos sigue dando que hablar. La última de estas críticas ha partido del grupo Izquierda Unida, que ha decidido presentar en el Congreso una solicitud con el fin de modificar los protocolos de investidura, tal y como recoge ABC. Esto implicaría que se eliminase de las investiduras la utilización de cualquier “símbolo religioso”.
Han sido Gaspar Llamazares y Joan Herrera los encargados de registrar la solicitud en el Congreso. En opinión de IU, los símbolos religiosos deben eliminarse de los protocolos porque España es un “estado aconfesional”. También han solicitado que se elabore un “protocolo aconfesional” que rija las ceremonias institucionales y sirva de cara a las relaciones con otras confesiones.
Desfiles
Llamazares y Herrera sostienen que la eliminación de los símbolos religiosos en el protocolo el una “asignatura pendiente” en una España en la que “militares y policías desfilan en procesiones religiosas” y en la que todavía permanecen algunas cruces en diversos colegios.
“No es justificable”
Para IU el uso de símbolos religiosos carece de base legal, y lamentan que el Real Decreto que establece el formato de los protocolos no haga alusión a dichos símbolos. “No es entendible ni justificable que en un Estado aconfesional los ministros juren o prometan el acatamiento de la Constitución ante una Biblia y un crucifijo”, concluyen.
La voz de la ciudadanía
No sólo Izquierda Unida está en contra del uso de símbolos religiosos en actos protocolarios. Algunos ciudadanos también se han manifestado en contra de la utilización de la Biblia y el crucifijo en la investidura del nuevo Gobierno. De hecho, El País recogió la carta de un ciudadano que preguntaba al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, si pretendía eliminar los símbolos religiosos de los actos protocolarios. Esta carta se limitó a lanzar una pregunta que actualmente se hacen muchos españoles, y que podría llegar a convertirse en una cuestión a debatir durante la presente legislatura.
