La portavoz de Educación de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) en el Congreso, Caridad García Álvarez, ha solicitado la comparecencia del ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, para que explique «la vuelta de la catequesis a las aulas» con el nuevo currículo de Religión.
A juicio de la diputada madrileña, el Gobierno del PP «introduce dentro de las escuelas la catequesis, no ya el estudio de las religiones, sino la catequesis».
García Álvarez recuerda al mismo tiempo que desde hace tiempo ya advierte de esta actitud del Gobierno, así como de la necesidad de romper el acuerdo con la Santa Sede «y de establecer lo que marca la Constitución, que es un Estado no confesional».
«Estamos absolutamente en contra de que se imparta religión en las escuelas, y mucho más aún que imparta catequesis a los niños y niñas a través de las escuelas», insistido la parlamentaria.
INICIATIVA EN EL PARLAMENTO CATALÁN
Precisamente, García Álvarez se ha reunido este lunes en Barcelona con su homólogo del Parlamento catalán, Joan Mena, para trazar una estrategia conjunta «contra esta imposición del Ejecutivo de Mariano Rajoy de reintroducir la catequesis en las aulas.
Así, el diputado catalán ha registrado este lunes también en el Parlamento regional una propuesta de resolución, con la que busca el establecimiento de un plan para garantizar la laicidad en el modelo educativo catalán.
La iniciativa parlamentaria que impulsa Mena incluye: el rechazo «frontal» al nuevo currículo de la asignatura; instar al Gobierno catalán a «realizar las gestiones oportunas ante el Ejecutivo central para garantizar un sistema educativo aconfesional», al mismo tiempo que pedir al departamento de Educación catalán que «evite el adoctrinamiento que supone el nuevo currículo de Religión y establecer un plan para garantizar la laicidad dentro del modelo educativo catalán».
Caridad García ha trasladado a su compañero el apoyo de su grupo parlamentario en el Congreso a esta propuesta de resolución. Mientras, el diputado catalán ha reclamado que tanto Convergencia como Uniò apoyen la iniciativa.
