“La Gran Mezquita de París es ante todo argelina y nunca será otra cosa, y eso es lo más importante”, afirmó el exembajador de Argelia en Francia Mohamed-Antar Daoud. El Makhzen todavía no ha digerido este axioma, tanto que ha activado a sus medios ya sus historiadores para demostrar que este lugar de culto pertenece a Marruecos, a través de la alteración y la mentira, dos marcas registradas del régimen marroquí.
“La Mezquita de París es un proyecto que partió del palacio real de Rabat en 1917. Se promulgó un dahir (decreto) relativo a la construcción de instalaciones de alojamiento, dos hoteles en Medina y La Meca, en más de un instituto musulmán y la Mezquita de París”, se jacta un académico marroquí al micrófono de una herramienta de propaganda de la DGED, el equivalente marroquí de la DGSE francesa de la que es apéndice. “Es bajo la égida del sultán Moulay Slimane que este proyecto se anunciará a partir de 1920 y las primeras obras se iniciaron el 18 de octubre de 1922”, continúa el autor de un libro titulado La Mezquita de París, obra marroquí. “El Estado francés y el Estado argelino tienen la intención de organizar el centenario de la construcción de esta mezquita que, en la base, fue dirigida por la sociedad de Habous, es un estatuto mortmain, inalienable y que ha sido administrado por Marruecos desde su inauguración por Moulay Youssef en 1926 hasta después de la independencia de Marruecos en 1956”, argumenta.
Y lanzar gravísimas acusaciones contra los rectores argelinos que siempre han gestionado este lugar de culto. “El dahir de 1920 fue reconocido por la ley de 1920 publicada en el Boletín Oficial de la República Francesa y que se refiere a la propiedad de esta mezquita y del instituto musulmán por parte de la sociedad de Habous. Es un estatuto del derecho musulmán el que hace de la Mezquita de París un bien inalienable y que sigue perteneciendo a la sociedad Habous, de ahí las maquinaciones, e incluso las falsificaciones que se han producido, en particular por parte del rector que ha sido designado por Francia contrariamente a la el reglamento de la sociedad Habous y quién es Hamza Boubakeur”, denuncia.
“La empresa inmobiliaria Habous estaba dirigida por Abdelkader dit Kaddour Benghabrit y también por los miembros de la empresa, incluidos cinco marroquíes y por representantes de Argelia y el Bey de Túnez. Pero después, entre 1957 y 1958, Hamza Boubakeur estaba destinado a ser nombrado jefe de un proyecto separatista, la república saharaui en el oeste de Argelia, pero la peligrosidad de este proyecto empujó a Francia a cancelarlo. Como Hamza Boubakeur apoyó el proyecto de organización común de las regiones saharianas creado a partir de 1957, que incluye las regiones donde se descubrieron yacimientos de petróleo y hierro, fue recompensado posteriormente nombrándolo rector de la Mezquita de París. Y este último, por medio de su escolta, falsificó los estatutos poniendo los nombres de su propia familia como miembros. Desempeñó un papel importante en la anexión de territorios marroquíes a Argelia, en particular Touat”, dijo el historiador marroquí, según el cual “todos los documentos franceses muestran una maquinación llevada a cabo por Hamza Boubakeur o Dalil Boubakeur y los distintos rectores argelinos que siempre han ignorado la historia de la mezquita y el carácter marroquí de este edificio”.
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No entendemos, exactamente, a quién dirige sus reproches este portavoz del Makhzen o si estos últimos se agrupan, sobre todo en estos momentos, al parecer, de grandes tensiones entre París y Rabat. Sea como fuere, para él, “Marruecos debe estar presente en la ceremonia del centenario porque no podemos hacer borrón y cuenta nueva y permitir la amnesia y olvidar todos los logros de los gobiernos marroquíes de Cherifian y también de los artesanos y trabajadores que están detrás de esta obra”. “, porque la Mezquita de París no se hubiera podido construir sin los “cinco millones de francos donados por Moulay Youssef y las suscripciones organizadas por todo Marruecos”.
El Makhzen, que teme que el papel jugado por Marruecos, que estuvo detrás de la fundación y construcción de la Mezquita de París, haya sido “pasado por alto en silencio”, cree que tiene derecho a estar “al frente de las personalidades asistentes al centenario festividades”.
No dejaremos de contactar al Dr. Dalil Boubakeur para responder a estas acusaciones marroquíes.